MADRID 18 Oct. (EUROPA PRESS) -
Una delegación de diputados japoneses, formada por unas 80 personas, ha visitado este martes el polémico templo bélico de Yasukuni, en Tokio, en el marco del festival de otoño, un día después de que el primer ministro, Shinzo Abe, enviara su tradicional ofrenda floral.
Entre los visitantes se encuentra además el ministro de Sanidad, Empleo y Bienestar, según ha informado la agencia de noticias nipona Kiodo.
Los homenajes en Yasukuni suelen irritar a los países de la región, sobre todo a China y Corea del Sur, que consideran que este lugar sirve para enaltecer el belicismo japonés que arrasó el sudeste asiático el siglo pasado.
Como ocurre en cada festival de otoño y primavera, Abe ha enviado una ofrenda tradicional sintoísta, una rama del árbol sakaki decorada con tiras de papel, seda o algodón, si bien se espera que siga la política de los últimos años de no acudir presencialmente al templo, donde se rinde homenaje a los militares muertos durante las guerras imperialistas de la primera mitad del siglo XX, incluidos varios destacados criminales de guerra.
Pekín y Seúl están especialmente sensibilizados con este tema porque sufrieron la ocupación durante la Segunda Guerra Mundial, lo que se tradujo en campos de concentración para los hombres y esclavitud sexual para las mujeres