MADRID, 27 Oct. (EUROPA PRESS) -
El secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, ha condenado este jueves la muerte de tres 'cascos azules' chadianos de la Misión Multidimensional Integrada de Estabilización de Naciones Unidas en Malí (MINUSMA) por la explosión de una mina antipersona en la región de Kidal (norte).
En su comunicado, Guterres ha expresado su "sinceras condolencias" al Gobierno de Chad y a los familiares de las víctimas, deseando además una rápida recuperación a los dos 'cascos azules' heridos en el incidente.
Asimismo, ha recalcado que "los ataques contra 'cascos azules' de la ONU podrían equivaler a crímenes de guerra", reclamando que los responsables del atentado "sean llevados rápidamente ante la justicia".
Guterres ha solicitado además al Gobierno y los grupos armados firmantes del acuerdo de paz que aceleren la puesta en marcha del mismo, reiterando que este tipo de ataques "no afectarán a la determinación de la ONU de apoyar al pueblo maliense en su búsqueda de la paz".
El jefe de la MINUSMA, Koen Davidse, ha condenado también el atentado, que ha descrito como "un acto abyecto que pretende desestabilizar el país y los logros conseguidos con el proceso de paz en curso".
Más de 80 miembros de la MINUSMA han muerto desde 2013 en ataques de los numerosos grupos armados que actúan en el norte de Malí.
El norte de Malí es una región convulsa con presencia de tropas francesas desde la revuelta tuareg de 2013, que rápidamente fue secuestrada por grupos yihadistas, lo que provocó la intervención militar de París en su antigua colonia.
Diversos grupos armados han ejecutado en los últimos meses varios ataques en Malí, siendo uno de los más graves un atentado suicida ejecutado en enero por Al Murabitún contra una base militar de Gao, en el que murieron al menos 77 soldados y miembros de milicias firmantes del acuerdo de paz de 2015.
Tras el atentado, el presidente de Malí, Ibrahim Boubacar Keita, hizo un llamamiento a aplicar en su totalidad el acuerdo de paz, pidiendo que el ataque no impacte negativamente en este proceso.
Las principales coaliciones armadas del norte de Malí --la Coordinación de Movimientos del Azawad (CMA), de mayoría tuareg, y la Plataforma, integrada por milicias progubernamentales-- firmaron a mediados de septiembre un nuevo acuerdo para detener todas las hostilidades en el país.