MADRID, 6 Jul. (EUROPA PRESS) -
El secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, ha criticado este jueves el "uso excesivo de la fuerza" empleado por Israel durante su operación en Yenín, que se saldó con doce muertos y cientos de heridos, y ha alertado de que estas acciones únicamente "radicalizan" a la población.
Así, ha dicho sentirse "profundamente consternado" por la operación y ha condenado "contundentemente todos los actos de violencia contra los civiles", según un comunicado de la ONU.
En este sentido, ha aclarado que su condena se aplica a "todo uso excesivo de la fuerza" y ha manifestado que las operaciones israelíes se han convertido en "los peores actos de violencia registrados en Cisjordania durante años".
"De nuevo pido a Israel cumplir con el Derecho Internacional, incluido el ejercicio de la contención y el uso proporcionado de la fuerza. El uso de ataques aéreos no concuerda con lo esperado en el marco de operaciones llevadas a cabo por las fuerzas de seguridad", ha aseverado.
Además, ha dicho entender las preocupaciones "legítimas de Israel en materia de seguridad", pero ha recalcado que la "escalada de violencia no es la solución". "Solo provoca un aumento de la radicalización y lleva a un círculo de violencia y derramamiento de sangre", ha sostenido.
Previamente, un grupo de expertos de Naciones Unidas ha afirmado que la reciente operación lanzada por el Ejército de Israel en la ciudad cisjordana de Yenín "podría constituir un crimen de guerra".
Asimismo, han hecho hincapié en que "los ataques constituyen un castigo colectivo sobre la población palestina, que ha sido descrita como 'una amenaza de seguridad colectiva' a ojos de las autoridades israelíes", a lo que se suma su "grave preocupación" por el uso de armamento y tácticas militares al menos en dos ocasiones durante las últimas dos semanas en la zona.
"Los palestinos en los Territorios Palestinos Ocupados son personas protegidas bajo el Derecho Internacional, que cuentan con todos sus derechos, incluida la presunción de inocencia", han dicho los expertos, que han aseverado que "no pueden ser tratados como una amenaza de seguridad colectiva por parte de la potencia ocupante, especialmente cuando avanza hacia la anexión de la tierra palestina ocupada y desplaza y quita sus posesiones a los resientes palestinos".