LONDRES 12 Sep. (Reuters/EP) -
El ministro británico de Asuntos Exteriores, William Hague, ha advertido este jueves de que cualquier acuerdo para poner el armamento químico sirio bajo control internacional debe partir de la necesidad de identificar "todas" las armas e impedir que caigan en "malas manos".
"Es necesario que se nos garantice que todas las armas químicas han sido identificadas y puestas bajo seguridad y que no van a caer en malas manos", ha declarado Hague ante el Parlamento. Proteger debidamente estas armas supone "inmensas dificultades prácticas", ha advertido.
Hague se ha referido con ello a la propuesta rusa de poner el arsenal de armas químicas de Siria bajo control internacional, que fue entregada ayer miércoles a Estados Unidos y sobre la que podrían hablar este mismo jueves en Ginebra el secretario de Estado norteamericano, John Kerry, y el ministro ruso de Exteriores, Sergei Lavrov.
Uno de los objetivos del plan es impedir una acción armada de Estados Unidos en Siria, después de que el presidente norteamericano, Barack Obama, haya amenazado con castigar militarmente el régimen sirio por el supuesto ataque químico del pasado mes de agosto en los suburbios de Damasco.
Al respecto, el jefe del Foreign Office ha afirmado este jueves ante el Parlamento que el cambio de actitud de Rusia respecto a Siria es el resultado de las amenazas militares de Estados Unidos. "El incremento de las pruebas sobre el uso de estas armas y las discusiones, en particular por parte de Estados Unidos, sobre la posible acción militar, han causado un cambio en la posición rusa", ha declarado.