MADRID 25 Ene. (EUROPA PRESS) -
El Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) ha advertido este martes a Estados Unidos contra el posible traslado de su Embajada de Tel Aviv a Jerusalén, resaltando que "desataría una nueva fase de conflicto".
"Con este paso, la Administración estadounidense creará una atmósfera explosiva, agregando combustible a las llamas y sirviendo únicamente a la postura racista y extremista de Israel", ha dicho.
En un comunicado publicado en su página web, el grupo ha recalcado que "el pueblo palestino en su conjunto no reconoce el derecho de Israel a poseer un sólo metro de territorio palestino".
Así, ha sostenido que el traslado de la Embajada sería un paso "totalmente sesgado a favor de la ocupación israelí", afirmando que el Gobierno estadounidense "perdería su papel político relacionado con el conflicto".
"Viene a confirmar la falta de transparencia por parte de Estados Unidos en el caso (y) eliminaría lo que queda de los derechos del pueblo palestino y su causa", ha indicado.
Hamás ha manifestado además que el traslado de la Embajada estadounidense "supone un menosprecio a las resoluciones de Naciones Unidas sobre Jerusalén y a los derechos del pueblo palestino sobre su tierra".
"Es una interferencia obvia a favor de la ocupación israelí y, al hacerlo, Estados Unidos será cómplice en los crímenes de la ocupación israelí", ha recalcado.
Por ello, ha reclamado a la población "que se una ante esta política estadounidense y los pasos israelíes que puedan llegar como consecuencia".
"La continuidad de la Intifada de Jerusalén y los actos de resistencia como elección estratégica seguirán frente a los abrumadores desafíos a los que hace frente la causa de nuestro pueblo", ha apuntado.
Asimismo, ha pedido a las naciones "árabes e islámicas" que "se unan en torno a este asunto vital" y que "adopten medidas urgentes para evitar la intención estadounidense de trasladar la Embajada".
Hamás ha insistido en que "Jerusalén es un territorio ocupado que seguirá siendo únicamente palestino". "Ninguna parte puede cambiar la realidad histórica de Jerusalén", ha reiterado, añadiendo que "Jerusalén seguirá siendo el eje de la lucha palestina".
EL TRASLADO
El domingo, el portavoz de la Casa Blanca, Sean Spicer, explicó que están en la "fase inicial" del debate sobre el cumplimiento de la promesa electoral del presidente estadounidense, Donald Trump, de trasladar la Embajada.
El Gobierno israelí tiene su sede en Jerusalén, que describe como su capital, si bien la mayoría de sus altos mandos militares tienen su despacho en Tel Aviv.
Recientemente, el expresidente estadounidense Barack Obama renovó la exención presidencial que aplazaba nuevamente la recolocación de la Embajada durante seis meses.
En su decisión, Obama citó "intereses de seguridad nacional" para prolongar la exención a la decisión del Congreso en 1995 de reconocer Jerusalén como capital de Israel y trasladar allí la Embajada.
Estados Unidos no ha reconocido oficialmente Jerusalén como capital del país, a pesar de que Israel así lo reclama, debido a que el Derecho Internacional considera la ciudad dividida porque la mitad de ella está en Cisjordania y es por tanto territorio palestino ocupado militarmente por Israel.