El OIM y ACNUR muestran su preocupación por los riesgos a los que se enfrentan los refugiados
MADRID, 15 Dic. (EUROPA PRESS) -
El Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) ha denunciado este jueves que hombres armados han matado en el estado de Warrap, en el norte de Sudán del Sur, a dos refugiados que huían del conflicto entre el Ejército de Sudán y las Fuerzas de Apoyo Rápido (RSF).
Varios hombres rodearon el miércoles un convoy de ACNUR que trasladaba refugiados desde Abyei, región en disputa entre Sudán y Sudán del Sur, hasta un asentamiento de refugiados en Wedweil, en el estado sursudanés de Bar al Gazal, en el noroeste del país. Estos obligaron a los tripulantes a descender de los vehículos y secuestraron a un joven de 21 años y un hombre de 62.
Las autoridades locales informaron posteriormente que habían encontrado a los dos secuestrados --ambos del estado de Nilo Azul de Sudán-- muertos. El resto del convoy llegó a salvo a Wedweil, tal y como ha asegurado la agencia de Naciones Unidas para los refugiados.
"Este incidente trágico y sin sentido pone en duda toda nuestra estrategia para reubicar a los refugiados que llegan a Sudán del Sur a través de Abyei a un lugar seguro en Wedweil, donde abrimos un nuevo asentamiento para recibir a los refugiados que huyen del conflicto de Sudán", ha declarado la representante de ACNUR en el país, Marie-Helene Verney.
Así, ha señalado que los socios humanitarios han asumido "la mayor parte de la tarea inmensamente desafiante" de trasladar a las personas en peligro que llegaron a la frontera de Sudán del Sur en busca de seguridad. No obstante, ha remarcado que la responsabilidad de garantizar que los repatriados, los refugiados y los trabajadores humanitarios estén seguros recae en el Gobierno de Sudán del Sur.
ACNUR, junto a la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), han mostrado su "profunda preocupación" por los riesgos que se enfrentan al reubicar a refugiados y repatriados fuera de las zonas fronterizas. Los recientes sucesos "han puesto en primer plano los principales desafíos a los que se enfrentan las agencias humanitarias", según reza un comunicado conjunto.
Las agencias han hecho referencia a un segundo incidente, que tuvo lugar también durante la jornada del miércoles, cuando un barco de la OIM comenzó a naufragar debido a los fuertes vientos y las aguas turbulentas, si bien las personas que se encontraban a bordo fueron trasladadas a otros barcos y llegaron a su lugar de destino gracias a la operación de rescate.
Desde el inicio del conflicto en Sudán a mediados de abril, la OIM ha trasladado a más de 105.000 personas por río y unas 59.000 por avión. El jefe de la misión de la OIM en Sudán del Sur, John McCue, se apoya en estos datos para subrayar que "el transporte por río sigue siendo la única opción viable para trasladar" a los civiles.
En este sentido, ACNUR y la OIM han pedido al Gobierno de Sudán del Sur que redoble sus esfuerzos para facilitar el transporte de refugiados y repatriados a lugares seguros, ya que más de 438.000 personas han llegado a Sudán del Sur desde abril para escapar del conflicto en Sudán. De ellos, 365.000 son sursudaneses y 71.000 refugiados.
Actualmente, Sudán ha cumplido más de ocho meses de conflicto entre el Ejército sudanés y las Fuerzas de Apoyo Rápido (RSF), enfrentamientos que estallaron el 15 de abril tras las fuertes discrepancias sobre la integración del entonces grupo paramilitar --ahora declarado en rebeldía-- en el seno de las Fuerzas Armadas, que hicieron descarrilar el proceso de transición abierto tras el derrocamiento de Omar Hasán Al Bashir después de 30 años de poder.
La guerra en Sudán ha devastado por completo el país y generado una de las mayores crisis humanitarias de tiempos recientes en África. El país suma, conflicto tras conflicto, casi siete millones de desplazados forzados y la última guerra se ha retroalimentado con un histórico conflicto intercomunitario en la región de Darfur, escenario, según ONG, de constantes atrocidades desde el estallido de la guerra.