MADRID, 7 Dic. (EUROPA PRESS) -
Human Rights Watch (HRW) ha alertado este miércoles de que muchos países occidentales carecen de un marco legal efectivo en contra el matrimonio infantil, una práctica que no sólo tiene lugar en países en vías de desarrollo, sino que también se realiza en algunas de las mayores potencias del mundo, como Estados Unidos
Según han advertido desde HRW, acabar con el matrimonio infantil es de máxima importancia, ya que es una práctica que resulta extremadamente dañina para las niñas, independientemente del país en el que estén. La inmensa mayoría de las niñas que se casan siendo menores dejan los estudios y tienen más posibilidades de sufrir pobreza en algún momento de su vida.
Por otro lado, las menores casadas se quedan embarazadas a una edad muy temprana, con todos los riesgos de salud que eso conlleva, tanto para el bebé como para la madre. Por otro lado, HRW ha denunciado que las niñas casadas sufren mayor riesgo de ser víctimas de violencia doméstica y encuentran muchas más dificultades para escapar de un matrimonio abusivo que si fueran mayores de 18 años.
La organización ha subrayado que esta práctica también tiene lugar en numerosos países occidentales, donde es mucho menos visible a nivel internacional que en África, Asia y Oriente Próximo.
En la gran mayoría de países europeos y estados de Estados Unidos, la edad mínima para contraer matrimonio es de 18 años, pero muchos cuentan con excepciones legales que permiten que un menor pueda casarse si cuenta con el consentimiento de los padres o el permiso de un juez. Si se tienen en cuenta estas excepciones, ha criticado HRW, en países como España, Reino Unido, Austria, Italia o Alemania, la edad mínima pasa a ser de 16 años en vez de 18.
En algunos estados de Estados Unidos, según ha advertido la organización, no hay ni siquiera edad mínima para contraer matrimonio. En el estado de Nueva York, entre el año 2000 y 2010, 3.853 menores se casaron con el permiso de sus padres o de un juez. HRW ha denunciado que en la inmensa mayoría de estos casos, el matrimonio era entre mujeres adolescentes y hombres adultos.
En Serbia, por otro lado, el 3 por ciento de las mujeres casadas de entre 20 y 24 años aseguraron que habían contraído matrimonio antes de cumplir los 18. HRW ha criticado que muchos países occidentales carecen de un marco legal que luche contra esta práctica a nivel nacional, ya que no lo consideran un problema social urgente.