La organización recuerda al Gobierno kurdo que está obligado a facilitar la asistencia humanitaria
MADRID, 21 Jun. (EUROPA PRESS) -
Las fuerzas de seguridad de la región semiautónoma iraquí del Kurdistán, los peshmerga, están deteniendo a miles de civiles que huyen del territorio ocupado por el grupo terrorista Estado Islámico según ha alertado este miércoles la organización Human Rights Watch, que ha denunciado que en muchos casos se impide el acceso a las ONG y ha recordado al Gobierno Regional de Kurdistán (KRG) que está obligado a facilitar una asistencia humanitaria sin obstáculos.
"El Ejército de Irak debe hacer todo lo posible para ayudar a los civiles a alcanzar la seguridad y obtener alimentos, agua y medicinas", ha declarado el sub director para Oriente Próximo de Human Rights Watch, Lama Fakih, quien sostiene que "la situación se volverá aún más urgente cuando las fuerzas antiterroristas comiencen las operaciones para retomar Hawija y Tal Afar".
Varios testigos han asegurado a HRW que en cada uno de los puestos de control del territorio controlado por el KRG se ha procedido a detener a los civiles durante días o semanas, sin comida ni asistencia y en muchos casos expuestos a los ataques de Estado Islámico.
Desde el 18 de abril, más de 5.000 personas que intentaban huir de Tal Afar para refugiarse en el territorio controlado por el KRG fueron retenidas por las fuerzas peshmerga y pasaron varios días sin comida antes de ser trasladados a Sahlej, un pueblo a 10 kilómetros de la línea de frente, dentro de la zona de bombardeos contra el grupo terrorista.
En varias ocasiones a lo largo de abril y mayo, los peshmerga prohibieron el paso a decenas de civiles durante tres, cinco o incluso 14 días, e impidieron a las organizaciones humanitarias efectuar las entregas de paquetes de ayuda. Un ciudadano retenido en el puesto de control de la población ha asegurado a HRW que pasó "tres días asustado ante la posibilidad de que el Estado Islámico nos matara a todos y, al mismo tiempo, de que mis hijos murieran de frío".
Según ha asegurado la ONU, los peshmerga retuvieron a unos 200 civiles de Tal Afar durante más de dos meses en un puesto de control en Al Fadhilya, 15 kilómetros al norte de Mosul y a 22 kilómetros de la línea de frente, y que a las organizaciones no se les permitió el acceso para proporcionar ayuda humanitaria. Los civiles en Hawija y Tal Afar, a 60 y 55 kilómetros de Mosul respectivamente, han estado bajo el control de Estado Islámico desde junio de 2014 y, según las estimaciones de Naciones Unidas, 80.000 personas permanecen en Hawija, quedando 20.000 en Tal Afar.
"DETENER A LOS QUE HUYEN ES INHUMANO"
"Estas familias han vivido durante años bajo los terribles abusos de Estado Islámico, meses con alimentos, agua y medicinas limitadas, y han arriesgado sus vidas tratando de llegar a un lugar seguro", ha declarado Fakih, quien considera que "detener a la gente que huye de Estado Islamico para alcanzar la seguridad y obtener la ayuda que necesitan es inhumano".
HRW ha reconocido la legitimidad de la preocupación por la seguridad y el derecho a inspeccionar la áreas controladas por el Estado Islámico, sin embargo, ha emplazado a las autoridades a que permitan que la atención médica, incluidos los primeros auxilios, llegue rápidamente a todos en los lugares. Además, la organización ha instado a que se identifique a las personas vulnerables para darles prioridad, como aquellas que necesitan asistencia médica inmediata, y proporcionarles toda la ayuda necesaria, como refugio, comida, leche para los bebés y agua.
HRW ha recordado a las autoridades del KRG que deben garantizar una revisión judicial inmediata e independiente en los puestos de control y permitir que los detenidos tengan acceso a abogados y atención médica, así como contacto con sus familias.
De acuerdo con el Derecho Internacional Humanitario, las partes en el conflicto deben hacer todo lo posible para alejar a la población de los alrededores de los objetivos militares, y tomar todas las precauciones necesarias para proteger a los civiles de los daños. Además, están obligadas a facilitar una asistencia humanitaria rápida y sin obstáculos a todos los civiles necesitados.