MADRID, 12 Ago. (EUROPA PRESS) -
La ONG Human Rights Watch (HRW) ha instado a las fuerzas de seguridad de Kenia a actuar con moderación en el marco de las protestas registradas en el país tras las elecciones presidenciales para evitar que se produzca una escalada de violencia en el país.
"Ante el incremento de las protestas y de los enfrentamientos en algunas zonas del país, es importante que la Policía trabaje de forma consciente para contribuir a la disminución de la violencia en el país, no al contrario", ha aseverado Otsieno Namwaya, miembro de HRW en África.
"La Policía debe abstenerse de hacer uso de gas lacrimógeno o de munición simplemente porque consideren que se trata de una manifestación ilegal", ha manifestado Namwaya en un comunicado.
Asimismo, la organización ha señalado que, en tal de tener que hacer uso de la fuerza, la Policía keniana deberá asegurarse de que el ejercicio de la misma no resulte desproporcionado.
El viernes por la tarde, la Comisión Electoral de Kenia proclamó oficialmente al actual presidente, Uhuru Kenyatta, como vencedor de las elecciones celebradas el pasado martes, después de que la oposición denunciara un ciberataque que habría decantado la victoria en favor del candidato oficialista.
El anuncio de la comisión ha provocado una serie de protestas en los principales bastiones de la oposición en el país, especialmente en las localidades de Kisumu, Mombasa y en algunas zonas de Nairobi, la capital del país,
Aunque el Gobierno ha reforzado la seguridad en varios puntos del país para impedir que se repitan los disturbios registrados durante los últimos días, que se han saldado con cinco muertos, la comunidad internacional teme una escalada de violencia como la que tuvo lugar tras las elecciones de 2007.
Entonces, Odinga perdió frente al entonces dirigente, Mwai Kibak. En sólo dos meses, más de mil personas murieron y 600.000 tuvieron que abandonar sus hogares.
HRW ha indicado que, como método para controlar las aglomeraciones, el gas lacrimógeno debe ser utilizado sólo cuando sea estrictamente necesario y para responder a un alto nivel de violencia. Además, este no debe ser usado en espacios cerrados y las latas no deben ser lanzadas nunca contra los individuos.