MADRID 19 Dic. (EUROPA PRESS) -
Human Rights Watch (HRW) ha pedido este viernes una investigación más profunda sobre los ataques en el este de Ucrania supuestamente cometidos por las fuerzas ucranianas, acusadas de violencia indiscriminada, contra civiles.
Aunque las primeras investigaciones concluyeron que las tropas de Ucrania no fueron responsables de los ataques a civiles registrados por HRW, éstas sólo analizaron las grabaciones de una agencia militar y no tuvieron en cuenta los informes forenses hechos sobre el terreno.
"A pesar de que Ucrania se ha tomado en serio las acusaciones y ha hecho una investigación, se necesita otra más profunda", ha dicho el director ejecutivo de HRW, Kenneth Roth. "La investigación apenas ha arrojado nuevos datos, así que no pueden extraerse conclusiones", ha añadido.
ANÁLISIS DE LAS ARMAS
En una reunión celebrada el 17 de noviembre con el fiscal del caso, HRW dio datos sobre la localización, la hora, la fecha, el tipo de armas y la dirección de los ataques en la ciudad de Donetsk, y apuntaba a la responsabilidad de las tropas ucranianas y al incumplimiento del Derecho Internacional.
En la última reunión entre el fiscal y la organización, se describieron los pasos dados por el Ejército, que analizó las grabaciones del Centro de Operaciones Antiteroristas, que graba todas las actividades militares en el este de Ucrania, para determinar quién lanzó los misiles Grad.
Las grabaciones demostraban que las tropas gubernamentales no lanzaron ataques con estos misiles, según informó entonces la Fiscalía, además de que la Guardia Nacional ni siquiera tenía acceso a estos misiles.
Sin embargo, "una investigación que sólo tiene en cuenta sus propias grabaciones difícilmente será seria", ha dicho Roth. "Antes de negar la responsabilidad del Gobierno, las investigadores deben examinar los datos de otras fuentes independientes", ha añadido.
HRW registró impactos de misiles Grad en zonas controladas por los rebeldes, aunque en el ataque del 12 de julio en Marinka, en el que murieron al menos seis civiles, los lanzamientos se hicieron desde las zona prorrusa, por lo que debería abrirse una investigación más profunda.
ATAQUES DE OCTUBRE
La Fiscalía tampoco ha encontrado pruebas de que las fuerzas gubernamentales lanzaran ataques indiscriminados en Donetsk en octubre, ya que al examinar el inventario de armas prohibidas por el Tratado Antiminas de 1997 y no encontrarlas, el Ejército concluyó que Ucrania, que firmó el tratado, no lanzó el ataque.
Sin embargo, las Fuerzas Armadas no examinaron la lista de HRW. Además, la agencia identificó el 20 de octubre el uso de misiles 9M27K, que no están incluidos en el Tratado Antiminas pero sí en la Convención de Bombas de Racimo de 2008, que no firmó Ucrania pero cuyo uso constituye un ataque indiscriminado por sus efectos a gran escala en los que las víctimas suelen ser civiles y militares.
El 14 de diciembre, HRW pidió a la Fiscalía ucraniana que continuara la investigación, incluyendo en esta ocasión el inventario de bombas de racimo usadas en el ataque de Donetsk. La organización se reunió también con altos cargos de los Ministerios de Defensa, Exteriores e Interior y del Servicio de Seguridad de Ucrania.
HRW pidió a estos altos cargos que dieran órdenes a las fuerzas gubernamentales de no usar explosivos en zonas muy pobladas. Altos cargos del Ministerio de Defensa han informado de que se han dado órdenes a todos los comandantes de informar a las tropas sobre la responsabilidad penal de Ucrania por incumplir las leyes de la guerra.
A estas órdenes, Roth ha considerado que "las tropas sobre el terreno no entenderán el respeto al Derecho Internacional sin una explicación". "Las autoridades deben dar órdenes concretas, como que el misil Grad no se use en zonas muy pobladas", ha añadido.