Actualizado: miércoles, 13 septiembre 2017 7:50


MADRID, 13 Sep. (EUROPA PRESS) -

La organización no gubernamental Human Rights Watch (HRW) ha pedido este martes la liberación inmediata de dos periodistas detenidos en Irán en agosto y a los que no se ha imputado hasta la fecha.

Las autoridades del país centroasiático detuvieron el 13 de agosto a Sasan Aghaei, subdirector del diario reformista 'Etemad', y el 22 de agosto a Yaghma Fashjami, periodista del portal de noticias Didban Iran.

"Las agencias de Justicia e Inteligencia de Irán tienen un patrón duradero de juzgar a periodistas por dudosos cargos sobre seguridad nacional", ha recordado la directora de HRW para Oriente Próximo, Sarah Leah Whitson.

"Los últimos periodistas arrestados no han sido acusados de nada más allá de ejercer su derecho a la libertad de expresión, y deben ser liberados inmediatamente", ha recalcado. Tanto Aghaei como Fashjami habían sido detenidos de forma arbitraria previamente.

HRW ha indicado que desde su arresto, el cuarto desde 2009, Aghaei ha permanecido bajo aislamiento en la prisión de Evin. Su familia ha denunciado que "las autoridades le están presionando para que confiese tener lazos con el portal de noticias Amad News", que Teherán considera un medio de oposición.

"Podrían haberle citado en lugar de aparecer y arrestarle como si fuera un criminal", han lamentado estas fuentes. La organización ha resaltado además que la detención en aislamiento de forma indefinida es un tratamiento cruel e inhumano que puede equivaler a tortura.

Por su parte, fuentes cercanas a la familia de Fashjami han indicado que las autoridades que le detuvieron por un periodo de cinco días extendieron su detención por un periodo de un mes. "La familia ha ido a los tribunales a diario, pero aún no saben los cargos presentados contra él", han añadido.

HRW ha indicado que la situación de Aghaei y Fashjami no es nueva en el país, citando el caso de Ehsan Mazandarani, un periodista reformista detenido en Evin desde el 11 de marzo.

El periodista fue liberado el 11 de marzo tras cumplir un año de cárcel por "asamblea y colusión contra la seguridad nacional", si bien fue detenido un mes después, tras lo que las autoridades argumentaron que su excarcelación había sido "un error".

El 31 de agosto, la madre de Mazandarani, Azam Eghtesad, afirmó que la salud del periodista se había deteriorado en prisión.

Apenas dos días antes, las autoridades liberaron a Hengameh Shahidi y Zeinab Karmianian, dos periodistas a las que el Ministerio de Inteligencia arrestó en marzo, sin que por el momento esté claro si llegaron a ser imputados.

También el 29 de agosto, Alí Mojtahedzadeh, abogado de seis administradores de la red social Telegram arrestados antes de las presidenciales de mayo, afirmó que sus clientes habían sido condenados a penas de entre tres y cinco años de cárcel.

Los condenados fueron arrestados junto a otros seis administradores de Telegram, todos ellos supuestamente cercanos a los reformistas. El presidente del país, Hasán Rohani; el ministro de Inteligencia, Mahmud Alavi; y varios parlamentarios se opusieron a las detenciones.

Whitson ha resaltado que "las agencias de Inteligencia de Irán parecen estar de acuerdo al menos en una cosa, su postura represiva hacia los periodistas y la libertad de prensa". Reporteros Sin Fronteras (RSF) ha indicado en su informe sobre libertad de prensa de 2017 que el país es una de las cinco mayores prisiones para periodistas.

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