BUDAPEST 13 Jun. (Reuters/EP) -
Hungría ha aprobado este lunes una ley que permite a la Policía devolver a los inmigrantes ilegales detenidos a ocho kilómetros de la frontera sur con Serbia, donde se encuentra la valla fronteriza, lo que ha generado críticas del Alto Comisionado de la ONU para los (ACNUR).
"El objetivo es permitir que (las autoridades) puedan acompañar al otro lado de las puertas de la frontera a los nacionales de terceros países que se encuentran en Hungría de manera ilegal y que fueron detenidos dentro de los ocho kilómetros de la frontera", se señala en los motivos de la nueva ley. Las autoridades serbvias no han realizado ningún comentario por el momento.
La valla de alambre de espino construida a lo largo de la frontera sur de Hungría con Serbia y Croacia ha ayudado a reducir drásticamente el flujo de refugiados que el año pasado cruzaron desde los Balcanes hacia el norte de Europa, especialmente en Alemania. Sin embargo, un goteo constante de inmigrantes sigue llegando a la frontera de Hungría con Serbia. Budapest ha establecido dos zonas de tránsito allí, donde los inmigrantes pueden presentar una solicitud de asilo.
Hasta el momento, Hungría ha registrado este año 19.140 solicitudes de asilo y más de 14.000 inmigrantes han cruzado la frontera sur de forma ilegal, según cifras del Gobierno.
Hungría ha limitado recientemente el número de admisiones diarias dentro de la zona de tránsito a un máximo de 30, según explicó la semana pasada el portavoz del Gobierno, Zoltan Kovacs. El portavoz añadió que Hungría estaba cumpliendo la legislación europea y la internacional, así como los protocolos húngaros de admisión.
Este estrecho cuello de botella ha provocado que los inmigrantes se amontonen en los campamentos improvisados cerca de las zonas de tránsito. Los campos se encuentran en territorio húngaro, pero en el lado sur de la valla.
ACNUR ha manifestado que la nueva ley aprobada por el Parlamento de Hungría sólo agravará la situación de los que están esperando para poder presentar una solicitud de asilo. El portavoz de ACNUR en Budapest, Erno Simon, ha señalado que la medida obligará a los inmigrantes a esperar fuera de las zonas de tránsito y podría llevar a muchos a recurrir a las mafias. "Obviamente, esto sólo exacerbará las condiciones inhumanas en las dos zonas de tránsito", ha denunciado Simon.
Otro grupo defensor de los Derechos Humanos, el Comité Helsinki de Hungría, ha acusado al Gobierno de querer mantener el número de inmigrantes lo más bajo posible. La copresidenta del Comité, Marta Pardavi, ha señalado que la Policía, en base a la nueva legislación , escoltará a los inmigrantes de vuelta al otro lado de la valla de las zonas de tránsito, donde tendrán que hacer cola y sin servicios básicos. "En lugar de proporcionarles un tratamiento adecuado y los procedimientos que señala la ley, la intención es... no tener ningún solicitante de asilo en Hungría", ha añadido.