KARLSRUHE (ALEMANIA), 9 (DPA/EP)
Una mujer alemana que presuntamente se unió al grupo yihadista Estado Islámico ha sido imputada por la supuesta comisión de crímenes de guerra, contra la humanidad y por favorecer un genocidio, según ha informado este miércoles un fiscal de la ciudad de Karlsruhe.
La mujer fue arrestada en octubre al entrar al país por el aeropuerto de la ciudad de Frankfurt. Sobre ella pesaba una orden de arresto emitida por el alto tribunal de Hamburgo.
Las autoridades alemanas creen que la mujer se casó con varios miembros de Estado Islámico. Entre otras cosas, uno de sus maridos supuestamente mantenía a una mujer yazidí como esclava y se cree que la mujer sabía que el hombre violaba repetidamente a la víctima.
"Ella misma abusaba de la mujer casi a diario, especialmente después de las violaciones", ha indicado el fiscal, que ha señalado que, "por ejemplo, la golpeaba y pateaba regularmente, le tiraba del pelo o golpeaba su cabeza contra la pared".
Asimismo, la mujer supuestamente forzaba a la víctima a rezar de acuerdo a ritos islámicos, una táctica de Estado Islámico para aniquilar la fe yazidí, según ha remarcado el fiscal.
JUICIO A UN SIRIO POR PLANEAR UN ATENTADO
Por otro lado, un hombre sirio de 29 años ha comparecido este miércoles en un tribunal de Berlín acusado de supuestamente planear un ataque terrorista y de financiación al terrorismo. En concreto, el hombre está acusado de planear un ataque en 2019 que pretendía matar o herir al mayor número de personas posible.
La acusación ha remarcado que su arresto, en noviembre de 2019, evitó que siguiera adelante con sus planes. El hombre, vestido con ropa oscura, ha escuchado en silencio las acusaciones en su contra y únicamente ha hablado para confirmar su identidad.
Según su defensa, no tiene previsto realizar ningún comentario acerca de los cargos. Sobre el hombre pesan otras penas de prisión. En mayo de 2020, un tribunal de Berlín le condenó a tres años y dos meses de prisión por ordenar la comisión de un acto de violencia "grave", una condena que se solapa con los cargos actuales, que se basan en información sobre la construcción de explosivos y armas.
Las autoridades han detallado que el hombre entró en Alemania como refugiado en 2014 y se le concedió un permiso de residencia. Según la acusación, mantiene ideas islamistas radicales desde julio de 2017 y ha defendido la ideología de Estado Islámico.