Los incendios declarados en el estado de Washington obligan a evacuar dos nuevas ciudades

SEATTLE (ESTADOS UNIDOS), 21 (Reuters/EP)

Los servicios de emergencia del estado de Washington han extendido este viernes las órdenes de evacuación a dos ciudades más, Okanogan y Colville, amenazadas por una serie de grandes incendios que han arrasado el estado durante esta semana.

El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, ha firmado una declaración de emergencia para el estado de Washington, en la que autoriza al Departamento de la Seguridad Nacional y a la Agencia Federal de Emergencia a coordinar labores humanitarias en once condados y en varias reservas indias duramente castigadas por el fuego.

Las autoridades ordenaron el jueves a la población de Tonasket, una aldea ribereña de unos 1.000 habitantes situada tan sólo a 40 kilómetros de la frontera sur de Canadá a huir de sus casas cercadas por el incendio.

Unos 40 kilómetros más al sur del río, los servicios de emergencia han emitido este viernes órdenes adicionales de evacuación de algunas zonas de Okanogan, una ciudad de la reserva india de Colville, y han advertido de la urgencia de evacuar a la población en una publicación de Facebook en la que han recomendado "no esperar a avisar puerta por puerta".

El complejo Okanogan incluye el llamado 'Incendio del Río Twisp', que ha acabado con la vida de tres bomberos cuando trataban de evacuar a unas 4.000 personas en las ciudades de Twisp y Winthrop, situadas a unos 48 kilómetros al oeste de Okanogan.

Al menos 70 incendios han arrasado esta semana varios estados afectados por la sequía, gran parte de ellos en Washington, Oregon, Idaho, California y Montana, según ha informado el Centro Nacional de Emergencia de Incendios en Boise.

Los incendios, a los que están haciendo frente más de 30.000 bomberos y personal de apoyo, han quemado más de 4.000 hectáreas de terreno a lo largo de la región.

Se estima que los costes causados en esta zona podrían superar los 101 millones de euros hasta la fecha, según el Centro de Incendios. Con una mano de obra y otros recursos debilitados, el Ejército estadounidense y personal de Canadá, Australia y Nueva Zelanda se han hecho cargo de los incendios para proporcionar refuerzos.