Evacúan un municipio de Lübtheen (norte) por la cercanía de las llamas a las viviendas de los vecinos
SCHWERIN (ALEMANIA), 13 (DPA/EP)
Los Bomberos de Alemania que combaten los incendios forestales en el norte del país han tenido que enfrentarse este lunes al peligro añadido de la explosión de munición antigua.
Unos 500 efectivos de emergencias han estado luchando contra los incendios, que se declararon el lunes por la tarde en dos antiguos campos de entrenamiento militar cerca de Lübtheen y Hagenow, a unos 100 kilómetros en el este de Hamburgo.
El administrador del distrito, Stefan Sternberg, ha declarado que los incendios habían crecido hasta alcanzar las 100 y 35 hectáreas, respectivamente, a última hora de la noche.
Hace cuatro años, la antigua zona de entrenamiento militar cercana a Lübtheen sufrió el peor incendio forestal de la historia de la región, con casi 1.000 hectáreas calcinadas. Las operaciones de extinción se vieron dificultadas por la presencia de munición sin detonar, algunas de ellas de la Segunda Guerra Mundial.
Las autoridades están especialmente preocupadas por el incendio cerca de Lübtheen. El pueblo de Volzrade, perteneciente al municipio de Lübtheen, ha sido evacuado por la noche, ya que las llamas se han acercado a menos de 800 metros de las casas.
Según las autoridades, la situación es aún más difícil que en el incendio de 2019, ya que la gran cantidad de madera muerta que quedó en el lugar está añadiendo combustible a las llamas, generando calor que penetra profundamente en el suelo y hace que la munición vieja explote. Además, los fuertes vientos han empeorado la situación.
Sternberg ha explicado que los equipos de Bomberos esperan que una franja libre de vegetación que rodea el antiguo emplazamiento militar detenga el fuego.