MADRID, 11 Jul. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno de India ha pedido a Pakistán que se mantenga al margen de los asuntos internos de sus países vecinos tras las declaraciones del primer ministro paquistaní, Nawaz Sharif, en las que condenaba la muerte del comandante del grupo armado Hizbul Muyahidín, Burhan Wani.
Burhan Wani, de 22 años de edad, lideraba uno de los grupos armados que operan en Cachermira y fue abatido en una operación llevada a cabo por las autoridades indias. Pakistán lo ha calificado de "asesinato extrajudicial" y ha asegurado que eso no disuadirá a la población de Cachemira de buscar su derecho a la autodeterminación.
La ministra de Asuntos Exteriores india, Sushma Swaraj, ha asegurado que la postura de Islamabad demuestra su vinculación con el terrorismo. "Esto demuestra la relación continua que Pakistán tiene con el terrorismo al que además usa como política de Estado", ha comentado Swaraj, según recoge el periódico indio 'The Tribune'.
La muerte de Wani ha provocado una serie de manifestaciones a las que las autoridades inidas han respondido con fuego real. Pakistán, además de condenar el ataque, ha citado al Alto Comisario indio en Islamabad, Gautam Bambawale, para presentar una protesta formal y trasladarle sus preocupaciones por el "asesinato de Burham Wani y varios civiles en la región de Cachemira a manos del Ejército indio así como de otras fuerzas paramilitares indias", según se ha mostrado en un comunicado.
"Es deplorable este uso excesivo e ilegal de fuerza contra civiles que estaban protestando contra la muerte de Burhan Wani", ha declarado el primer ministro paquistaní.
India y Pakistán están enfrentados desde 1947 por la región de Cachemira, la única región musulmana en India y sobre la que Pakistán reclama soberanía. El grupo armado Hizbul Muyahidín está considerado grupo terrorista por India, así como por la Unión Europea y Estados Unidos, y actúa a favor de la soberanía de la región para incorporarse a Pakistán.