MADRID, 23 Ene. (EUROPA PRESS) -
Las autoridades de India han recurrido este lunes a "legislación de emergencia" en el marco de las normativas sobre tecnología e información en un intento de vetar un documental de la cadena de televisión BBC sobre el primer ministro, Narendra Modi, sobre los disturbios de Gujarat en 2022, donde murieron cerca de un millar de musulmanes.
El Gobierno ha ordenado a las plataformas de redes sociales bloquear los enlaces al documental, titulado 'India: La Cuestión Modi', que ha sido calificado por las autoridades como una "pieza de propaganda sin objetividad que refleja un pensamiento colonialista".
Así, la difusión del documental a través de Twitter o YouTube ha quedado prohibido, según informaciones del diario 'The Times of India'. El caso ha provocado la polémica en el país, especialmente en relación a la primera parte del documental, que se basa en una serie de memorandos que muestran cómo la actitud de Modi fue criticada por la comunidad internacional cuando era ministro principal de Gujarat y tuvo lugar el repunte de violencia.
Modi ha sido acusado en varias ocasiones de haber sido cómplice de los disturbios que tuvieron lugar después de que 59 peregrinos hindúes murieran en un incendio registrado en un tren a su paso por la localidad de Godhra. Esto generó unas severas represalias que duraron varios días contra la minoría musulmana en la región, a la que se acusó del incidente.
Las estimaciones más prudentes cifran los muertos en algo más de 1.000, en su mayoría musulmanes. Hubo más de 200 desaparecidos y otros 2.500 heridos. Una comisión posterior establecida por el Gobierno de Gujarat señaló que el incendio fue provocado y un tribunal condenó a 31 personas, todas musulmanas, de haber participado en la quema del tren.
La primera parte de la cinta se emitió el martes de la semana pasada en Reino Unido, pero no se ha emitido en India, donde el contenido del mismo sí ha circulado por las redes sociales. Cientos de jueces y altos cargos han acusado a la BBC de tener una "visión imperialista" y de tratar de provocar nuevas tensiones entre hindúes y musulmanes.
Sin embargo, la citada cadena británica ha incidido en que el documental está "rigurosamente contrastado y cuenta con los mayores estándares periodísticos". La oposición india ha condenado la decisión del Gobierno, al que ha acusado de hacer uso de la "censura".