Actualizado: domingo, 21 agosto 2016 15:11

YAKARTA, 21 Ago. (Reuters/EP) -

Las autoridades indonesias están investigando si un presunto miliciano arrestado la semana pasada estaba planeando un ataque en la isla de Bali, uno de los destinos turísticos más populares del país, y escenario a principios de la pasada década de uno de los atentados más sangrientos de la historia reciente, que se cobró la vida de 202 personas.

La Policía dice haber encontrado en el domicilio del sospechoso, en la isla de Sumatra (oeste del país) "una bomba y explosivos de alto impacto". El hombre no ha sido identificado mientras las autoridades intentan corroborar los cargos de los que se le acusa -- filiación con Estado Islámico y atentar contra una comisaría de Policía en la ciudad de Solo, en Java central, el mes pasado --.

"De momento solo es un plan", apuntan fuentes policiales tras el arresto del sospechoso en Lampung, el último de una serie de redadas antiterrioristas, particularmente enfocadas contra la organización yihadista, que en enero perpetró su primer atentado a través de una célula nacional indonesia con un ataque en un barrio de la capital, Yakarta, en el que fallecieron cuatro personas.

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