YAKARTA 28 Feb. (Reuters/EP) -
La Agencia Nacional Antiterrorista indonesia ha convocado este miércoles un polémico encuentro que ha reunido a 124 terroristas y 51 supervivientes de los ataques que ha sufrido el país, incluyendo los atentados mortales de Bali.
La reunión forma parte de una campaña de reinserción impulsada por las autoridades del país de mayoría musulmana más poblado, iniciativa pionera que ha dado pie a otras propuestas para plantar cara a este problema.
Chusnul Kotimah, víctima del atentado de 2002 en una discoteca de Bali que acabó con la vida de 202 personas y en el que sufrió graves quemaduras, ha declarado que estaba preparado para perdonar a los que realizaron dichos ataques.
"Puedo aceptar lo que ocurrió. Puedo perdonarles", ha afirmado a Reuters en un evento en un hotel de Yakarta, añadiendo que se ha dirigido a los yihadistas para decirles que como musulmán piensa que no había justificación alguna para tanto terror.
No obstante, el responsable de la asociación de supervivientes ha decidido no asistir, criticando que únicamente se trataba de una reunión masiva bajo la atenta visión de los medios de comunicación. Algunas otras víctimas han reclamado un mayor apoyo y ayuda médica de las autoridades.
"La reconciliación masiva propuesta por la BNPT (Agencia Nacional Antiterrorista) es demasiado arriesgada para las víctimas en relación a su estado mental, psicológico y su trauma", ha dicho Sucipto Hari Wibowo, cofundador de la Fundación Indonesia de Supervivientes y víctima del ataque a la Embajada australiana en Yakarta. Sin embargo, el ministro de Seguridad, Wiranto, ha declarado que le gustaría que este tipo de eventos se realizasen regularmente.
Uno de los yihadistas ha afirmado que conocer a los supervivientes le ha ayudado a entender el sufrimiento que han causado los ataques a las víctimas.
"Creo que es la manera más efectiva de desradicalización ya que muchos terroristas (hasta que no conocen a las víctimas) no son conscientes de que sus actos son un error", ha declarado Sofyan Tsauri, condenado por suministrar armas a un campo de entrenamiento militar en la provincia de Aceh. Indonesia ha sufrido numerosos ataques militares en los pasados años, el más destructivo fue el atentado de 2002 en la ciudad de Bali, que impulsó a los países occidentales a ofrecer ayuda formando unas fuerzas de élite para contrarrestar el terrorismo que resultaron efectivas.
No obstante, en últimos años ha tenido lugar un resurgimiento del yihadismo nacional, inspirado en Estado Islámico. Se cree que
centenares de indonesios han viajado a Siria para unise al grupo yihadista aunque muchos de ellos han vuelto desde que perdieron territorio.
Era humano aferrarse a la rabia, ha dicho Deny Mahieu, un policía herido durante los ataques de 2016 en Yakarta, tras reunirse con uno de los sospechosos autores del caso. "Pero... si seguimos sintiendo rencor no arreglaremos el problema", ha afirmado.