Indra y otras compañías de defensa piden que el futuro programa de ayudas i+D lleve a contratación conjunta

BRUSELAS 3 Nov. (EUROPA PRESS) -

Indra y otras compañías del sector de la defensa como la francesa Dassault, la británica BAE Systems y el grupo aeronáutico Airbus han reclamado que el futuro programa de la UE de ayudas a la investigación y el desarrollo para el sector lleve a la contratación conjunta "real" de equipos por parte de los Gobiernos europeos.

"Un factor enorme que está provocando la actual vulnerabilidad de la industria de la defensa europea es la falta de perspectivas de grandes sistemas de contratación a nivel europeo en el futuro próximo", han advertido las empresas en un documento de la Asociación Europea de Industrias de Defensa, Seguridad y Aeronáutica que cuenta con 15 empresas europeas y 26 asociaciones del sector en 19 países, incluidas Indra y la Asociación Española de Empresas Tecnológicas de Defensa, Aeronáutica, Seguridad y Espacio.

Los jefes de Estado y de Gobierno de la UE han respaldado que la Comisión Europea lance una acción preparatoria relacionada con la investigación en Política de Seguridad y Defensa Común (CSDP) para explorar la posibilidad de poner en marcha un programa de ayudas a la investigación y desarrollo en apoyo del sector, un tabú hasta ahora.

"La acción preparatoria debe ser un enorme hito hacia una programa de investigación en defensa de la UE dentro del próximo marco financiero plurianual 2021-2028", ha admitido la industria del sector, que ha insistido en que resulta "esencial" utilizar dicha acción "como medio para garantizar que el programa futuro tendrá relevancia industrial y, por tanto, que debe ayudar a permitir la contratación conjunta real en Europa en el futuro próximo".

"El programa potencial de seguimiento debe por tanto elaborarse a medida de manera que lleve de forma directa o indirecta a proyectos de contratación concretos", han defendido, admitiendo con todo que será un desafío, desde el punto de vista político e institucional "dado que los clientes finales serán los ministerios de Defensa nacionales".

La industria admite que la acción preparatoria cuenta con un presupuesto "limitado", de entre 50 y 100 millones de euros "como mucho" entre 2017 y 2020 y por tanto piden "elegir un número pequeño de temas" aunque "lo más diversos posible".

DEMOSTRADOR TECNOLÓGICO

A fin de garantizar que la acción preparatoria "tiene relevancia industrial", la industria pide reservar "al menos el 50% del presupuesto" para un demostrador tecnológico que apoye futuros programas conjuntos. "En base al entorno de amenaza actual, un ejemplo podría tomarse de la vigilancia marítima, pero incluir la integración con medios aéreos y terrestres e implicar el uso de sistemas no tripulados", afirman en el documento.

También piden tener en cuenta en la acción preparatoria la importancia de que las fuerzas armadas de los Estados miembros "sean capaz de comunicarse con el otro e interoperar" en el marco de operaciones y la importancia de "adoptar estándares armonizados y estándar abiertos de sistemas" para plataformas futuras terrestres, aéreas y navales y la integración de armas y sensores en estas plataformas y el desarrollo de imágenes operativas comunes, un área que debería beneficiarse de "menos del 20% del presupuesto" de la acción preparatoria. Ello debe hacerse evitando duplicidades y en cooperación con la OTAN y explorar, a modo de ejemplo, la cooperación contra la guerra híbrida, que va más allá de los medios convencionales de guerra.

SEGURIDAD DE SUMINISTRO Y TECNOLOGÍAS EMERGENTES

La industria también pide destinar "alrededor del 20% del presupuesto de la acción preparatoria" a la seguridad de suministro de tecnologías clave para reforzar la libertad de acción europea y revertir "el número significativo" de tecnologías "críticas" que son contratadas desde fuera o amenazadas y piden que se seleccionen las áreas en base a criterios como la demanda tecnológica a nivel de la UE y de los Estados miembro y la relevancia industrial.

Asimismo, la industria de la defensa pide reservar "un máximo del 10% del presupuesto" a las nuevas tecnologías "emergentes o disponibles para todos sectores" que tienen "potencial" de ser determinantes para la defensa y que, a modo de ejemplo, "podrían venir de los materiales nuevos o capacidades quantum", es decir, de transmisión a partir de una cantidad mínima de energía a través de una longitud de onda pero insisten en que los proyectos deben ceñirse "específica a aplicaciones de defensa".

Y finalmente, piden reservar "una parte pequeña del presupuesto" para apoyar un estudio en detalle de las modalidades de un futuro programa europeo potencial de ayudas a la investigación. "Las especificidades de la defensa son tales que las modalidades que son adecuadas para la investigación civil quizá no sean óptimas para la investigación relacionada con la defensa", han avisado.