YAKARTA 23 Ene. (Reuters/EP) -
La Policía de Indonesia ha interrogado este lunes al clérigo musulmán Habib Rizieq después de que un grupo de defensa de los Derechos Humanos presentara una queja contra el religioso por haber manifestado durante un sermón que los nuevos billetes puestos en circulación presentan símbolos comunistas.
Rizieq, líder del Frente de Defensores Islámicos (FPI, por sus siglas en inglés), está siendo investigado por las fuerzas de seguridad en el marco de una serie de medidas puestas en marcha por las autoridades para luchar contra el fundamentalismo en el país.
El comunismo continúa siendo una cuestión delicada para la población indonesa, que sufrió la purga anticomunista en los años 60, cuando fueron prohibidas gran parte de la simbología y la literatura afines a esta ideología.
"Esto supone una investigación formal", ha informado el portavoz de la Policía de Yakarta Argo Yuwono. "Estamos analizando los comentarios que ha realizado el clérigo en relación con los símbolos comunistas en los billetes", ha añadido.
"Lo que muchas personas están interpretando como una hoz y un martillo es en realidad el logo del Banco de Indonesia, que forma parte de los elementos del billete que previenen su falsificación", ha indicado el Banco de Indonesia a través de un comunicado.
Rizieq, que podría enfrentarse a una pena de hasta cuatro años de prisión, fue interrogado la semana pasada por haber realizado una serie de declaraciones difamatorias en 2014 contra uno de los padres fundadores del país.
Los seguidores del religioso han condenado la investigación y han denunciado que se trata de una "criminalización" de su líder. "Se trata de una tiranía sistemática contra Habib Rizieq, lo cual destruye los pilares de la justicia. Es una forma de criminalizar a los clérigos", ha destacado el presidente en Yakarta del FPI, Novel Bamukmin.
Tanto el FPI como Rizieq han estado detrás de los mítines que han tenido lugar recientemente contra el gobernador cristiano de Yakarta, Basuki Tjahaja Purnama, al que acusan de haber insultado el Corán. Purnama, que está siendo juzgado por blasfemia, continúa siendo uno de los favoritos para las elecciones locales que tendrán lugar en febrero.
Varios grupos de defensa de los Derechos Humanos temen que el Gobierno no haya protegido debidamente a las minorías religiosas en el país, que cuenta con una mayoría musulmana.