Investigadores de la ONU piden sanciones contra empresas extranjeras vinculadas al Ejército birmano

YAKARTA, 5 Ago. (Reuters/EP) -

Investigadores de Naciones Unidas han instado a la comunidad internacional a aprobar sanciones contra empresas internacionales vinculadas a las Fuerzas Armadas de Birmania, a las que han señalado como posibles cómplices de crímenes internacionales por su responsabilidad indirecta en la persecución y masacre de la minoría rohingya.

Más de 700.000 rohinhgyas abandonaron el estado birmano de Rajine y huyeron a Bangladesh a raíz de la ola represiva lanzada en agosto de 2017 por las fuerzas birmanas. La ONU ha considerado acreditada la "intención genocida" de los militares, señalados como principales responsables de unos abusos que incluirían asesinatos masivos y violaciones grupales.

Un grupo de expertos de la ONU ha identificado a 59 empresas vinculadas a las fuerzas birmanas, entre ellas firmas de Francia, Bélgica, Suiza, Hong Kong y China. De ellas, 15 integran alianzas con los dos principales grupos militares o sus empresas subsidiarias, según el estudio.

"Por primera vez, un informe establece una imagen clara de la implicación de empresas europeas y asiáticas y argumenta que hay una relación que viola los tratados y las normas de la ONU", ha subrayado el jefe de este grupo, Marzuki Darusman, en una entrevista.

Los expertos también han reclamado la imposición de un embargo armamentístico sobre Birmania, para lo cual han incluido los nombres de 14 compañías que han vendido armas o equipos relaciones a las fuerzas de seguridad birmanas desde el año 2016. Entre estas firmas figuran empresas públicas de Israel, India, Corea del Sur y China.

Según los investigadores, cualquier relación con las Fuerzas Armadas de Birmana y sus empresas implica "un alto riesgo de estas contribuyendo o de quedar vinculado a violaciones de los Derechos Humanos y del Derecho Internacional Humanitario".

"Las empresas e individuos responsables pueden ser procesados", ha advertido Darusman, quien ha recordado que cualquier envío de armas a Birmania puede permitir que el Ejército "continúe con su represión de la población".