MADRID, 19 Ago. (EUROPA PRESS) -
Las autoridades surcoreanas investigan el supuesto cese de un oficial de Corea del Norte al que el dirigente, Kim Jong Un, habría enviado a "educación revolucionaria", un eufemismo utilizado para referirse a los trabajos forzados que deben cumplir altos cargos acusados de algún tipo de irregularidad.
Los medios locales se han hecho eco del posible despido de Won Tong Yon, que ejercía de vicepresidente del Departamento Frente Unido del Partido de los Trabajadores. Participaba en asuntos relativos a las relaciones con Corea del Sur y representó a su país en las conversaciones de alto nivel de febrero de 2014.
"Estamos viendo si le ha ocurrido algo a Won", ha dicho una fuente de la Inteligencia de Corea del Sur a la agencia oficial de noticias, Yonhap. El Gobierno surcoreano, por su parte, ha aclarado que por el momento sólo es un "rumor".
De confirmarse la muerte, el caso de Won se sumaría a las numerosas purgas de dirigentes llevadas a cabo desde la llegada de Kim Jong Un al poder, entre ellos el exministro de Defensa Hyon Yong Chol, que fue ejecutado. El actual líder ha llegado incluso a ordenar la muerte de su tío Jang Song Thaek, otrora 'número dos' del régimen.
La semana pasada, las autoridades surcoreanas también confirmaron la ejecución del viceprimer ministro Choe Yong Gon, que habría discrepado con las políticas de Kim Jong Un. En el caso de Choe, a Seúl le había llamado la atención que llevase "ocho meses" sin aparecer en público.