MADRID, 14 Jul. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno de Irak ha asegurado este jueves que está investigando un vídeo en el que varios militares lanzan desde un barranco a un hombre sospechoso de ser miembro del grupo yihadista Estado Islámico, tras lo que abren fuego contra el cadáver.
La grabación, cuya veracidad no ha sido confirmada oficialmente, fue grabada en los alrededores de la localidad de Mosul. Un portavoz del Ministerio del Interior ha recalcado que, de ser cierta, los responsables rendirán cuentas.
Sin embargo, la organización no gubernamental Human Rights Watch (HRW) ha afirmado que ha podido confirmar la veracidad del vídeo sobre la ejecución del detenido, según ha informado la cadena de televisión británica BBC.
Belkis Wille, investigadora de la ONG para Irak, ha subrayado que "en las últimas semanas de la batalla por la zona occidental de Mosul hubo una actitud perversa entre las Fuerzas Armadas por el deseo de acabar con la batalla cuanto antes, por lo que se alejaron de las leyes de la guerra".
Así, ha señalado que varios testigos han afirmado que, además de un aumento de las torturas y ejecuciones de sospechosos de ser miembros de Estado Islámico, hubo un incremento de la sensación de que estos actos no debían ser ocultados.
El vídeo ha salido a la luz pocos días después de que las Fuerzas Armadas de Irak rechazaran el informe de la organización no gubernamental Amnistía Internacional (AI), que reclamó la creación de una comisión independiente que investigue los posibles crímenes de guerra perpetrados por Estado Islámico, el Ejército de Irak y la coalición liderada por Estados Unidos en Mosul.
La organización denunció la muerte de cientos de civiles en los combates por la ciudad iraquí entre la organización yihadista y el Ejército del país.
El propio Al Abadi oficializó el lunes la derrota de los yihadistas en la ciudad con un discurso "desde el corazón de la liberada Mosul" en el que anunció "el fracaso del estado de terror" en que se ha visto sumida la zona desde hace más de tres años.
Las operaciones de las fuerzas de seguridad iraquíes continúan en otras partes del país para intentar expulsar a Estado Islámico del resto de zonas que controla, entre las que destacan las localidades de Tal Afar y Hawiya.