LONDRES, 5 Feb. (Reuters/EP) -
El encarcelamiento por parte de Estados Unidos de un antiguo asesor de la misión de Naciones Unidas en Irán forma parte de una campaña de "terror psicológico", ha declarado el Ministerio de Exteriores de Irán este lunes.
Ahmad Sheikhzadeh, ciudadano estadounidense nacido en Irán, fue sentenciado el viernes a tres meses de prisión por evasión de impuestos por no incluir el salario que percibía de la misión de la ONU (y que se le pagaba en efectivo) en su declaración de la renta y al ayudar a su familia y a sus amigos a hacer transferencias monetarias que violaban las sanciones impuestas por Estados Unidos a Irán.
Sheikhzadeh, de 61 años, ha admitido que omitió el sueldo de su declaración de la renta, pero ha declarado que la sentencia de prisión le parece "muy injusta" y que el proceso judicial ha sido un intento de conseguir que actúe como un informante desde dentro de la misión en Irán.
"Las acusaciones que se han presentado contra él son inaceptables e infundadas", ha manifestado el portavoz del ministerio de Exteriores iraní, Bahram Qasemi, en su rueda de prensa semanal en el canal de televisión oficial. "Este veredicto responde a una motivación política. Los estadounidenses están llevando a cabo constantemente una guerra psicológica contra Irán", ha añadido el portavoz.
Qasemi ha pedido a Washington que detenga su "presión continua" sobre los iraníes en suelo estadounidense y en otros países. "Los estadounidenses deberían dar marcha atrás a esta medida ilícita y liberar a todos los detenidos iraníes inmediatamente", ha advertido el representante gubernamental.
Un funcionario judicial dijo el año pasado que 56 iraníes fueron sentenciados a penas de cárcel en Estados Unidos, la mayoría de ellos por violar las sanciones impuestas por parte de Washington a Teherán. Por su parte, Irán tiene encarcelados, al menos, a siete ciudadanos y residentes permanentes estadounidenses.
Los últimos fueron Karan Vafadari, un hombre con doble nacionalidad iraní y estadounidense, y su mujer, Afarin Neyssari, residente permanente en Estados Unidos, quienes fueron sentenciados en enero a 27 y a 16 años de prisión respectivamente en Irán, tal y como ha revelado el propio Vafadari en una carta.
No está claro por qué cargos se ha encarcelado a la pareja, pero Vafadari está convencido de que la Guardia Revolucionaria le ha perseguido por sus "actividades internacionales" en el mundo del arte y por su doble nacionalidad.