MADRID, 18 Ago. (EUROPA PRESS) -
La vicepresidenta de Irán Masumeh Ebtekar ha asegurado este lunes que Teherán quiere trabajar con otros países de la región para promover la paz, negando que Irán tenga un interés de dominación en la zona, tal y como argumentan algunos de sus rivales.
En una entrevista concedida a la cadena de televisión británica BBC, Ebtekar ha destacado que el acuerdo alcanzado sobre el programa nuclear iraní "es un paso adelante" para el mundo, explicando que "significa una nueva era a la hora de trabajar internacionalmente en intercambios culturales y comerciales".
"Significa que Irán va a ser un actor más prominente en esta parte del mundo", ha agregado, destacando que "Teherán ha indicado claramente que cumplirá con el acuerdo". "Hay muchas pruebas que indican que Irán cumple sus compromisos a nivel internacional", ha manifestado.
Por otra parte, Ekbatar ha recalcado que Irán no dejará de apoyar "a todos aquellos que están amenazados por las políticas del régimen sionista --en referencia a Israel--", si bien ha asegurado que Teherán "quiere usar su influencia para promover la paz y la estabilidad".
"Nuestro ministro de Exteriores (Mohamed Yavad Zarif) está visitando la región porque mantener los lazos y recuperar la confianza de nuestros vecinos es importante para nosotros", ha apuntado.
Así, Ekbatar ha expresado el deseo de Irán "de ser capaces de recuperar la confianza con varios estados de la región para adoptar una postura firme frente el extremismo (...) y el Estado Islámico", al que ha descrito como "un fenómeno terrible".
En este sentido, ha revelado que Irán está "intentando establecer un diálogo" a través de canales diplomáticos con Arabia Saudí, que encabeza una coalición internacional contra los rebeldes huthis en Yemen, a los que acusa de estar respaldados por Irán. "Tenemos que resolver la guerra en Yemen, que está devastando a esa nación", ha valorado Ekbatar.
Irán ha sido criticado por Arabia Saudí y otros países de la región y potencias occidentales por su respaldo al presidente sirio, Bashar al Assad, y al partido-milicia chií libanés Hezbolá, si bien ha recibido reconocimiento por su lucha contra el Estado Islámico en Irak.