MADRID, 2 Ene. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno de Irán ha asegurado este lunes haber detenido a un número indeterminado de personas que estarían detrás de los disturbios registrados en algunas de las manifestaciones de los últimos días en el país, agregando que "hay esfuerzos en marcha para arrestar a otros tan pronto como sea posible".
En su comunicado, el Ministerio de Inteligencia ha apuntado que "algunas de las manifestaciones pacíficas celebradas para expresar demandas derivaron en violencia debido a la presencia de elementos sospechosos y agresivos", según ha informado la agencia iraní de noticias Tasnim.
Desde el jueves pasado, en Irán se están registrando las protestas más graves desde las que tuvieron lugar en 2009 a raíz de la reelección del presidente Mahmud Ahmadineyad.
Las protestas comenzaron en Mashhad, segunda ciudad del país, y se han extendido a otras ciudades, incluida Teherán. La televisión estatal ha informado este lunes de al menos diez muertos solo el domingo.
Asimismo, durante la jornada ha muerto un policía por disparos durante una manifestación en la localidad de Nayafabad, según ha confirmado un portavoz de la Policía.
Inicialmente, los manifestantes reclamaban mejoras económicas y protestaban contra la subida de los precios, pero en muchos lugares se ha pasado a consignas en contra del estamento religioso que gobierna el país, incluido el líder supremo, el ayatolá Alí Jamenei. Así, en algunas ciudades se han escuchado cantos de "abajo el dictador".
Este lunes era patente la presencia de las fuerzas de seguridad en la capital, Teherán, donde aún así surgen concentraciones de protesta espontáneas que se disuelven rápidamente, aunque el descontento es palpable a pesar de los llamamientos a la calma del presidente, Hasán Rohani.
Agentes antidisturbios y cañones de agua han sido desplegados en los puntos estratégicos de Teherán y unos 200 detenidos solo en la capital, según ha informado una fuente de las fuerzas de seguridad a la agencia de noticias semioficial ISNA.
Además, se ha bloqueado el acceso a la aplicación de mensajería instantánea Telegram y a la red social Instagram, principales herramientas de comunicación de las protestas.