MADRID, 13 Jul. (EUROPA PRESS) -
Irán y Turquía han reclamado este viernes al Gobierno de Bashar al Assad y a los rebeldes que acuerden un alto el fuego en Siria que, al menos, se prolongue durante el mes sagrado musulmán del Ramadán.
El ministro de Asuntos Exteriores de Turquía, Ahmet Davutoglu, se ha reunido en Ankara con su homólogo iraní, Alí Akbar Salehi, con quien ha coincidido en resaltar la necesidad de un cese del fuego durante este mes.
"Si hubiera un alto el fuego en Siria, los sirios musulmanes podrían vivir el Ramadán con seguridad y en paz", ha afirmado Salehi, que espera que el Gobierno sirio y los rebeldes acepten la propuesta, según ha informado la cadena iraní HispanTV.
Por otra parte, Davutoglu ha negado que Turquía sea una plataforma de envío de armas a los rebeldes y ha asegurado que el Gobierno turco está "completamente en contra de cualquier intervención externa en Siria", incluida la del partido-milicia chií libanesa Hezbolá, que combate, junto al Ejército sirio, contra los rebeldes.
Irán es uno de los principales aliados de Al Assad en Oriente Próximo y guarda estrechos vínculos, a su vez, con Hezbolá, que ya ha admitido públicamente su intervención en el conflicto sirio.
"Todos los actores extranjeros deben ser expulsados de Siria. Hezbolá, que se ha introducido en numerosas ciudades sirias (...), también debe ser expulsada de Siria", ha sentenciado Davutoglu, en la rueda de prensa, en presencia de su par iraní, según ha informado la agencia estatal turca, Anadolu.
El nuevo presidente de la coalición opositora siria, Ahmed Jarba, propuso el día después de ser elegido la puesta en vigor de un alto el fuego en la provincia de Homs, asediada durante las últimas semanas por el Ejército sirio y un enclave de gran importancia estratégica.
El año pasado, el entonces enviado especial de la ONU y la Liga Árabe para Siria, Kofi Annan, también instó a ambas partes a iniciar una tregua durante el Ramadán que no fructificó.