DUBLÍN, 20 Feb. (EUROPA PRESS) -
El primer ministro de Irlanda, Enda Kenny, ha pedido este martes un histórico perdón por la "indiferencia" mantenida por las autoridades ante los abusos sufridos por miles de mujeres en las conocidas como lavanderías de las Magdalenas, un sistema de asilos donde miles de mujeres eran sometidas a duras condiciones de trabajo.
"Yo, como 'taoiseach' (primer ministro), en nombre del Estado, del Gobierno y de nuestros ciudadanos, lamento profundamente y pido perdón a todas las mujeres por el daño sufrido", ha dicho el jefe de Gobierno en el Parlamento, donde se ha debatido un informe sobre los abusos.
Unas 10.000 mujeres jóvenes, en su mayoría madres solteras, fueron detenidas y forzadas a trabajar en un sistema de asilos gestionado por monjas católicas. Esta lavanderías, herederas de centros creados en el siglo XIX para atender a 'mujeres caídas' en la prostitución, surgieron en los años veinte del siglo pasado y perduraron hasta los noventa.
Alrededor de una veintena de estas mujeres han asistido este martes al debate parlamentario y han escuchado en persona las disculpas de Kenny, que ha lamentado la "profunda indiferencia" con la que las autoridades contemplaron los abusos, según informa 'The Irish Times'.
"Ahora sabemos que el propio Estado fue responsable de más de un cuarto de los ingresos en las lavanderías de las Magdalenas", ha explicado. En concreto, el Estado facilitó el 26,5 por ciento de los internamientos y también era responsable de la financiación y la inspección de estos centros.
El primer ministro confía en que la publicación del informe y la disculpa del Gobierno ayude en el proceso de duelo de las víctimas, que sea "un nuevo amanecer para quienes temían que la oscuridad nunca terminaría".