MADRID, 29 Dic. (EUROPA PRESS) -
Las autoridades israelíes han demolido este año más de un millar de inmuebles palestinos, una cifra récord y que ha afectado a alrededor de 7.100 personas, según la Oficina de la ONU para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA).
El informe, que recoge los datos hasta el 28 de diciembre, cifra en 1.089 el número de propiedades palestinas que ha sido derribadas o incautadas en Cisjordania y Jerusalén Este. Estas medidas, adoptadas por falta de permiso o como represalia a actividades violentas, han desplazado a 1.593 personas.
Por otra parte, unos 51.000 palestinos siguen desplazados en la Franja de Gaza como consecuencia de los enfrentamientos de 2014. La mayoría de ellos viven en refugios temporales proporcionados por organizaciones de ayuda humanitaria, ha explicado la OCHA en un comunicado.
La organización también ha detectado una merma de la libertad de movimiento de las personas, a pesar de que la de bienes parece remontar después de que Israel haya aliviado ligeramente el bloqueo que impone desde el año 2007 a la Franja de Gaza.
MENOS VÍCTIMAS
La tensión sigue presente en la zona desde el fracaso de las conversaciones de paz en el año 2014 y en octubre de 2015 se inició una escalada de violencia que aún persiste. Pese a esta escalada, la ONU ha detectado una reducción significativa en el número de víctimas.
Hasta el 26 de diciembre, habían perdido la vida 109 palestinos y 13 israelíes, por debajo de los 169 palestinos y 25 israelíes que fallecieron durante todo 2015. De las últimas víctimas palestinas, 80 corresponden a supuestos responsables de ataques contra objetivos de Israel.