MADRID, 6 Ene. (EUROPA PRESS) -
El Ejército de Israel se ha distanciado este lunes de la muerte del general iraní Qasem Soleimani en un bombardeo estadounidense en Irak y ha recalcado que las autoridades "miraron desde la línea de banda" lo que sucedía.
"Es bueno que pasara tan lejos", ha dicho Herzi Halevi, comandante del Mando Sur del Cuartel General del Ejército, quien ha agregado que la muerte de Soleimani tendrá probablemente un impacto sobre Israel.
Sin embargo, ha recalcado que Israel "no es el asunto aquí" y ha afirmado que "es necesario ver los asesinatos como éste como parte de una batalla entre Irán y Estados Unidos sobre el espíritu de Irak".
Halevi ha manifestado además que el Ejército no ha identificado por ahora intentos de Yihad Islámica, una milicia palestina respaldada por Irán, de llevar a cabo ataques contra Israel en respuesta a la muerte de Soleimani, según ha informado el diario israelí 'Yedioth Ahronoth'.
"Dimos un golpe significativo a Yihad Islámica", ha manifestado, en referencia al bombardeo ejecutado en noviembre en el que mató a Baha Abú al Atta, un destacado comandante del grupo, lo que desencadenó un intercambio de ataques.
Por otra parte, ha apuntado que la situación en la Franja de Gaza es "inestable", si bien ha resaltado que las condiciones de cara a un posible alto el fuego a largo plazo están vigentes. "Estamos preparados para cualquier escenario en 2020", ha zanjado.
LA MUERTE DE SOLEIMANI
Soleimani murió junto al 'número dos' de las Fuerzas de Movilización Popular (FMP), Abú Mahdi al Muhandis, y varios milicianos iraquíes y militares iraníes en un bombardeo ejecutado por Estados Unidos en el aeropuerto de la capital de Irak, Bagdad.
Washington argumentó que llevó a cabo el ataque "para proteger al personal estadounidense en el extranjero", a raíz de las protestas contra su Embajada en Bagdad en protesta por otro bombardeo en el que murieron 25 miembros de las FMP.
Los bombardeos contra las FMP fueron ejecutados en respuesta a la muerte de un contratista estadounidense en un ataque con proyectiles contra una base militar situada cerca de Kirkuk.
El Gobierno iraquí ha condenado estos ataques por parte de Estados Unidos y ha recordado que las FMP son un elemento fundamental en la lucha contra Estado Islámico.
En este sentido, ha denunciado que los bombardeos fueron llevados a cabo de forma unilateral y violando los acuerdos alcanzados con la coalición internacional que lidera Washington en la lucha contra los yihadistas.
Por ello, el Parlamento iraquí aprobó el domingo una moción que exige la expulsión de las tropas estadounidenses del país y obliga al Gobierno a comprometerse a hacer público cualquier acuerdo que alcance en el futuro para la presencia de asesores y formadores militares extranjeros.