JERUSALÉN 16 Mar. (Reuters/EP) -
El presidente de Israel, Reuven Rivlin, solicitará al Gobierno de Rusia que garantice que su retirada parcial de Siria no supone reforzar a las fuerzas iraníes y del partido milicia chií libanés Hezbolá que combaten junto al régimen de Bashar al Assad, ha informado un alto cargo israelí.
Rivlin se encuentra en Moscú para reunirse con el presidente ruso, Vladimir Putin, que anunció este lunes el repliegue del grueso de las fuerzas desplegads en Siria. Israel cree que la intervención de Rusia en Siria ha servido para contrarrestar en la guerra de Siria el peso de Irán y Hezbolá.
En su reunión de este miércoles por la tarde con Putin, Rivlin buscará "garantías" de que Rusia no permitirá que su retirada de Siria "refuerce a Irán y Hezbolá", según ha contado a Reuters un asesor del mandatario israelí.
Rivlin, que como jefe del Estado tiene competencias de carácter representativo, ha consultado con el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, antes de viajar a Moscú en visita oficial.
Israel ve a Hezbolá como su enemigo más peligroso y teme que esta milicia apoyada por Irán, con amplio dominio en el sur de Líbano, se esté fortaleciendo en la guerra de Siria y esté obteniendo armamento avanzado del régimen de Damasco.
A pesar de su declarada neutralidad en la guerra de Siria, Israel ha realizado varios ataques aéreos en Siria para impedir transferencias de armas con destino a Hezbolá. Los ataques israelíes han matado además a un general iraní y a dos destacados combatientes de Hezbolá.
Los israelíes también han atacado desde los Altos del Golán en lo que han definido como ataques de respuesta por bombardeos llegados desde territorio sirio y atribuidos a Hezbolá. Cuando Rusia comenzó su intervención en Siria en 2015, Netanyahu se puso en contacto con Putin para establecer un cauce de comunicación entre sus fuerzas militares con el objetivo de evitar enfrentamientos.