ROMA/BRUSELAS 28 Jun. (Reuters/EP) -
Italia exige a la Unión Europea que colabore en la recepción de los migrantes que llegan diariamente a sus costas y amenaza con cerrar sus puertos a los barcos de rescate internacionales que actúan en el Mediterráneo Central, según han informado a Reuters fuentes cercanas al Gobierno italiano.
"La situación a la que nos enfrentamos es seria y Europa no puede darle la espalda", ha advertido el embajador italiano en la UE, Maurizio Massari, al comisario europeo de Migración, Dimitris Avramopoulos, en una reunión celebrada este miércoles.
"Han discutido la idea de bloquear la entrada en los puertos a los barcos de rescate que porten banderas internacionales", ha contado la fuente. La semana que viene los ministros de migración de la UE discutirán en Tallín la petición de Italia de que otros países permitan el desembarco en sus puertos.
Esta decisión podría forzar a otros miembros de la UE a acoger a los migrantes, ya que muchas de las organizaciones de rescate que operan en Italia tienen su base en países como Malta, Alemania o España.
"Italia está saturada", ha advertido Massari. De las 200.000 camas para solicitantes de asilo que Roma había previsto, casi todas están ya ocupadas, ha añadido.
LA MIGRACIÓN EN CIFRAS
Italia ha recibido más de medio millón de embarcaciones repletas de personas migrantes desde 2014 y el año pasado alcanzó la cifra récord de 181.000. En lo que va da año se han registrado 75.000 barcas, un 14 por ciento más que el mismo periodo en 2016. Según el portavoz de la Organización Internacional para las Migraciones en Roma, Flavio Di Giacomo, desde el sábado unos 11.000 inmigrantes han sido rescatados de barcos en los que viajaban "inseguros y hacinados".
Italia es el punto principal de llegada a costas europeas de migrantes procedentes África, con llegadas diarias de barcas desde Libia. Los rescates en el Mediterráneo Central son normalmente realizados por ONG privadas.
Los países que hacen frontera con Italia y Grecia, el segundo territorio con mayor afluencia de refugiados, han cerrado sus fronteras y países miembros de la Unión Europea como Polonia y Hungría ha rechazado el sistema de acogida de refugiados.
La Unión Europea aprobó la semana pasada aumentar la financiación a Italia y Grecia pese a las reticencias que habían mostrado en años anteriores, evitando la reubicación de los migrantes a otros países miembros. También se van a incrementar las partidas de gasto destinadas a los países africanos emisores de refugiados, según informó un funcionario de la Comisión Europea.