ROMA, 25 Ago. (de la corresponsal de EUROPA PRESS C. Giles) -
Venecia será una ciudad completamente deshabitada en el 2030 debido al proceso de despoblación que está viviendo en los últimos años la ciudad de los canales, según los últimos datos del censo publicados en un artículo del diario 'La Repubblica'.
Según el estudio, dentro de 24 años, si el éxodo de la población que comenzó hace 40 años continúa a este ritmo, Venecia se convertirá en una ciudad fantasma, sin habitantes, y con sólo turistas: 20 millones al año y una media de 50.000 al día.
Los datos del censo de la ciudad arrojan que desde 1966, cuando se produjo una gran inundación, Venecia ha perdido la mitad de sus habitantes, pasando de los 121.000 de entonces a los 62.000 de ahora, de los que 3.000 son extranjeros.
Desde el 1966 han abandonado la ciudad flotante mil habitantes al año, incluso llegando a 1.500 abandonos algunos años, hasta el récord del año pasado, cuando dejaron Venecia 1.918 habitantes. "Estamos llegando al nivel de alarma, en cuanto lo superemos Venecia no será una ciudad normal y se convertirá sólo en una meta turística y perderá su encanto también para los mismos turistas", señaló el concejal para la casa de Venecia, Mara Rumiz.
Los expertos de movimientos demográficos prevén que el éxodo de Venecia continúe y las cifras de abandono de la ciudad en los próximos años se sitúen en una pérdida media de 2.000-2.500 habitantes anuales. No se prevé una inversión de esta tendencia, según el estudio. Asimismo, también descienden los habitantes de las islas del estuario veneciano, de 51.000 en el 1966 a las 31.000 de ahora.
Los problemas que están haciendo abandonar Venecia a sus habitantes son, además de la invasión de turistas, el agua alta y el peligro de nuevas inundaciones, a lo que se añade el precio de las casas. El mercado inmobiliario en la ciudad está dedicado a los ciudadanos extranjeros que quieren comprar sus segundas casas, que cuestan entre 6.000 y 8.000 euros por metro cuadrado mientras que para un alquiler de una casa de 80 metros cuadrados se pide unos 2.000 euros.
Asimismo, muchas de las casas a disposición se han convertido en pensiones y hostales para los turistas. En los últimos años, 706 apartamentos del centro histórico han sido destinados a hoteles para turistas, según el Observatorio de la Casa del ayuntamiento. Este año se han recibido 2.835peticiones para convertir edificios en pensiones.
También pesan sobre la población, los precios excesivos de restaurantes, así como la desaparición de tiendas como panaderías, fruterías, ferreterías, que han dejado su lugar a tiendas de regalos, de moda o restaurantes de comida rápida.
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