NUEVA YORK, 13 Ago. (EUROPA PRESS) -
Ivanka Trump se ha sumado a la condena pública de los grupos racistas y neonazis por los episodios de violencia ocurridos ayer en Charlottesville (Virginia), donde murieron tres personas y más de una treintena resultaron heridas por enfrentamientos entre manifestantes antifascistas y grupos supremacistas y neonazis, uno de cuyos integrantes mató a una mujer e hirió a otras 19 personas al arrollar una contramanifestación de izquierdas con su vehículo.
La hija y asesora del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha publicado dos tuits en los que afirma que "no debería haber espacio en la sociedad para el racismo, la supremacía blanca y los neonazis". "Todos debemos unirnos como estadounidenses y conformar un país unido", ha concluido.
Con este gesto, la hija del presidente se suma a la larga lista de políticos que han condenado las actitudes racistas y neonazis de las protestas. Entre ellos se encuentran miembros del partido republicano, el expresidente Barack Obama o incluso la primera dama, Melania Trump.
Se espera, sin embargo, que Donald Trump se posicione frente a lo ocurrido, sobre lo que únicamente ha publicado un tuit rechazando actitudes de "odio" y "violencia por todas las partes", lo que ha suscitado críticas por resultar insuficiente.
El senador republicano por Florida, Marco Rubio, ha asegurado que es "importante" que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, describa el incidente de Charlottesville (Virginia) como "un ataque de terrorismo de los supremacistas blancos".
Por el momento, las únicas declaraciones de Trump, vía Twitter, han sido "tenemos que estar unidos y condenar todo lo que el odio representa. No hay lugar para esta clase de violencia en América. Unámonos".