MADRID, 28 Nov. (EUROPA PRESS) -
El primer ministro de Japón, Shinzo Abe, ha anunciado este martes que ha solicitado una reunión urgente del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas por el misil balístico que Corea del Norte ha lanzado en las últimas horas sobre aguas niponas, objetivo habitual de estos ataques.
Abe ha insistido una vez más en la necesidad de que la comunidad internacional actúe al unísono para implementar las sanciones impuestas a Corea del Norte, que han aumentado en los últimos años a causa de las constantes pruebas nucleares y con misiles balísticos del régimen de Kim Jong Un.
El jefe de Gobierno, que ha comparecido ante los medios de comunicación en Tokio, ha considerado que esta nueva provocación es "absolutamente intolerable" porque socava los esfuerzos internacionales para solucionar de forma pacífica el conflicto con Corea del Norte.
Abe ha subrayado además que el Gobierno japonés está totalmente preparado para gestionar una crisis de este tipo y ha asegurado que se adoptarán las medidas que sean necesarias, si bien ha rehusado avanzar cuáles, según informa la cadena pública NHK.
En torno a las 3.17 horas del miércoles (tarde del martes en España) un misil balístico ha despegado desde la provincia norcoreana de Pyongan del Sur y 50 minutos después ha caído en aguas de la zona económica exclusiva de Japón, recorriendo unos 1.000 kilómetros, de acuerdo con la información proporcionada por Japón y Corea del Sur.
El Departamento de Defensa de Estados Unidos, por su parte, ha detallado que se trata de un misil balístico de alcance intercontinental. Fuentes del Pentágono consultadas por CNN han revelado que es el que más alto ha volado hasta la fecha, alcanzando los 4.500 kilómetros.
Corea del Norte no había llevado a cabo ningún ensayo balístico desde el 15 de septiembre, cuando lanzó un misil intercontinental que sobrevoló parte del territorio japonés e impactó en el mar al este de la isla de Hokkaido. Sin embargo, fuentes estadounidenses y niponas ya habían advertido de una prueba inminente.
En los últimos tiempos, el régimen de Kim Jong Un ha protagonizado una escalada militar, amenazando incluso con atacar el territorio estadounidense de Guam, en el océano Pacífico. El presidente norteamericano, Donald Trump, advirtió en verano de que respondería con "furia y fuego" a cualquier ataque norcoreano contra Estados Unidos.