La jefa de DDHH de la ONU avisa a Arabia Saudí de que pudo cometer un crimen de guerra con sus ejecuciones

MADRID, 14 Mar. (EUROPA PRESS) -

La Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, ha condenado la "ejecución en masa" en Arabia Saudí de 81 presos condenados por terrorismo y ha expresado su "preocupación" por la forma en que se habrían desarrollado los procesos judiciales o el trasfondo que habría tras ellos, hasta el punto de que teme que se hayan cometido crímenes de guerra por la forma en que se han llevado a cabo.

En este sentido, ha señalado que entre los reos ejecutados hay personas vinculadas a las protestas de 2011 y 2012, miembros de la minoría chií y siete yemeníes. En este sentido, cree que algunos de los juicios se desarrollaron sin unas mínimas garantías y hay casos que estarían vinculados a la guerra en Yemen, donde Arabia Saudí participa militarmente en apoyo al Gobierno del presidente Abdo Rabu Mansur Hadi.

"Aplicar la pena de muerte después de juicios que no ofrecen las garantías requeridas en cuanto a justicia está prohibido por el Derecho Internacional y podría equivaler a un crimen de guerra", ha advertido Bachelet en un comunicado en el que también ha apuntado que no informar a los familiares de los reclusos puede equivaler a tortura y malos tratos.

La expresidenta chilena ha recordado, en cualquier caso, que la pena de muerte es incompatible en líneas generales con los Derechos Humanos, especialmente en un país donde hay "una definición extremadamente amplia" de lo que se entiende por terrorismo y que incluye desde poner en riesgo la seguridad nacional hasta perjudicar la "reputación" de Arabia Saudí.

Menos de 40 países aplican a día de hoy la pena capital y Arabia Saudí ha superado en un sólo día las 67 ejecuciones perpetradas en todo 2021. Bachelet ha reclamado una moratoria "inmediata" y la conmutación de la pena para todas aquellas personas condenadas a muerte.