Turk apuesta por una mayor cooperación política frente a la migración y rechaza los discursos de odio e incitación
MADRID, 4 Oct. (EUROPA PRESS) -
El Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Volker Turk, ha recordado este miércoles la existencia del derecho a la autodeterminación a la hora de abordar la cuestión saharaui y ha abogado por poner los Derechos Humanos en el centro del proceso para lograr la "reconciliación".
"Hay un derecho a la autodeterminación que es parte del marco de los Derechos Humanos", ha dicho Turk en una entrevista concedida a Europa Press en el marco de su visita a Madrid para participar en un acto organizado por el Ministerio de Exteriores con motivo del 75 aniversario de la Declaración de los Derechos Humanos.
Así, ha subrayado que "hay estándares sobre Derechos Humanos que deben aplicarse a las personas que viven en el territorio (de Sáhara Occidental), pero también fuera, los que están en (los campamentos de refugiados de) Tinduf.
Turk ha incidido en que "los Derechos Humanos guiarán a una solución en lo relativo a reconciliación y construcción de confianza y justicia", si bien ha destacado que "ha de resolverse con un proceso político". "Espero que haya una solución para el pueblo saharaui", ha destacado.
"En lo relativo al Sáhara Occidental, hay resoluciones muy claras del Consejo de Seguridad y la Asamblea General de la ONU", ha manifestado, antes de indicar que "para que se solucione la situación es necesario un proceso político que siente a todos en la mesa (de negociaciones)".
"Eso es lo más importante, pero desde luego no es tarea del Alto Comisionado para Derechos Humanos", ha manifestado, antes de mostrar su satisfacción por la reciente visita a la región por parte de Staffan de Mistura, enviado especial para el Sáhara Occidental del secretario general de la ONU, António Guterres.
La antigua colonia española del Sáhara Occidental fue ocupada por Marruecos en 1975 pese a la resistencia del Frente Polisario, con quien se mantuvo en guerra hasta 1991, cuando ambas partes firmaron un alto el fuego con vistas a la celebración de un referéndum de autodeterminación.
El Frente Polisario sufrió un revés en 2022 cuando el Gobierno español dio un giro en su postura y anunció su apoyo al plan de autonomía marroquí, un cambio de postura en el asunto y que fue calificado de traición por el propio Frente Polisario y que desató además las críticas de Argelia, donde se encuentran los campamentos de Tinduf.
PONER LOS DDHH EN EL CENTRO DEL DEBATE SOBRE MIGRACIÓN
Por otra parte, en lo relativo a la respuesta de los gobiernos de España y otros países ante los flujos migratorios, Turk ha defendido la necesidad de "unir" las respuestas políticas y de Derechos Humanos, antes de destacar que "no se está viendo una discusión política sobre migración que esté basada en hechos y que esté informada en lo relativo a Derechos Humanos y la ley internacional sobre refugiados".
"Está siendo usado por algunos en el espectro político como un asunto para dividir, azuzar el miedo, hacer de menos a otras personas, a migrantes o refugiados. Tenemos todas estas discusiones, y al final vemos que más de 2.000 personas han muerto en el mar Mediterráneo este año", ha dicho. "Es una cifra horrible", ha lamentado.
En este sentido, ha apuntado al "envejecimiento poblacional en Europa" y ha insistido en que "la propia supervivencia" de los países europeos "depende de la migración", al tiempo que ha destacado que "a veces se olvida la Historia y que hubo 60 millones de personas desplazadas al final de la Segunda Guerra Mundial".
"No es que se pueda decir que no podemos gestionarlo. Europa era más pobre, no había recursos y aún así pudimos hacer frente de alguna forma a 60 millones (de desplazados y refugiados). La mayoría eran europeos, pero igualmente eran 60 millones de personas que no vivían en aquellos lugares de donde eran", ha explicado.
Por ello, ha insistido en que "es un asunto complejo" y ha reseñado que la situación de los Derechos Humanos "está en el centro". "Si hay violaciones de los Derechos Humanos, esa es la primera razón por la que la gente huye", ha señalado Turk, que ha abundado en que es importante que "este no sea un asunto que divida, sino que una a los países a colaborar entre sí".
"No hay que caer en las políticas identitarias o en el populismo", ha puntualizado, antes de resaltar que en las campañas electorales en Europa desde 2015 se ha visto que este tema "es un asunto para las elecciones, utilizados por los que no están interesados en encontrar una solución sino en usarlo para azuzar las emociones y el miedo entre la población".
"EL MIEDO NO ES BUEN GUÍA"
De esta forma, ha explicado que "el miedo nunca es un buen guía para nada" y ha abogado por "más solidaridad" y "una vía conjunta" para hacer frente a la migración de una forma "respetuosa con la ley". "La seguridad y el Derecho Internacional no son opuestos. Sólo se pueden llevar a cabo políticas de seguridad si se las ancla en los Derechos Humanos. No hay una diferencia artificial, como algunos quieren hacer creer", ha argumentado.
Turk ha defendido por ello la importancia de recordar que "se habla de seres humanos, por lo que es importante no despreciarlos". "Es importante, 75 años después de la firma de la Declaración Universal de Derechos Humanos, que recordemos de dónde venimos y que es algo que afecta a todos los seres humanos", ha destacado.
"Espero que todo aquel que tenga responsabilidad política en el mundo vea su papel a la hora de hacer avanzar los Derechos Humanos y no azuce el miedo, no divida y no desprecie al resto. Hay que volver a la Historia y a los pilares básicos, que son los derechos Humanos", ha puntualizado Turk, que ha pedido "quitar el componente emotivo a la discusión".
Por ello, ha apostado por "analizar seriamente qué puede hacerse en los países de origen, tránsito y destino" y "encontrar vías para trabajar juntos". "Un país no va a poder resolverlo por su cuenta. Es una ilusión pensar que un país va a poder impedir que la gente se desplace", ha recalcado.
"Es la política del avestruz", ha criticado Turk, que ha recordado que "es responsabilidad de estos países encontrar una solución y es algo más complejo que eso" y ha pedido a "todos los políticos" que lean la Declaración Universal de los Derechos Humanos para estructurar sus políticas en este campo.