MADRID 14 Ene. (EUROPA PRESS) -
El jefe del Ejército de Corea del Sur, Park An Su, y varios comandantes han testificado este martes ante una comisión especial del Parlamento sobre la declaración a principios de diciembre de la polémica ley marcial, que provocó la destitución del entonces presidente, Yoon Suk Yeol, y ha sumido al país en una grave crisis política.
La comisión fue formada en diciembre y está constituida por 18 miembros encargados de investigar las acusaciones de la Fiscalía contra Yoon, al que señala por presunta insurrección y abuso de poder.
Asimismo, el jefe del Mando Especial de Guerra del Ejército, Kwak Jong Keun, también se encontraba presente en la sala, según informaciones recogidas por la agencia surcoreana de noticias Yonhap.
No obstante, diputados del gubernamental Partido del Poder Popular (PPP) y del opositor Partido Democrático (PD) han discutido durante la comparecencia sobre la legitimidad de la ley marcial. El PPP ha aprovechado para criticar, además, la inclusión por parte del PD de acusaciones de "traición" contra Yoon.
La oposición, por su parte, ha criticado especialmente la movilización de efectivos durante la imposición de la ley. "El Ejército se movilizó y contaba con más de 180.000 balas, lo que podría haber convertido a Seúl en un segundo Gwangju", ha dicho el diputado Min Hong Chul en relación con la masacre que tuvo lugar en la ciudad en los años 80 durante una serie de protestas contra la dictadura.
Yoon, que se encuentra suspendido de sus funciones, no ha acudido a la primera vista celebrada por el Constitucional para decidir si ratificar o anular su cese y ha citado cuestiones de seguridad ante la posibilidad de ser detenido.
El Tribunal Constitucional tiene 180 días para decidir si respalda o rechaza la decisión del Parlamento de destituir a Yoon desde que recibió el caso, lo que tuvo lugar el 14 de diciembre. En caso de que la medida sea ratificada, el país deberá celebrar elecciones en un plazo de 60 días.
De hecho, el Parlamento surcoreano aprobó el 27 de diciembre la destitución del presidente interino, Han Duck Soo, quien ocupaba el cargo a raíz del cese de Yoon, después de negarse a nombrar a tres jueces para ocupar tres vacantes en la propia corte, tal y como reclamaba la oposición, que controla el legislativo.
La primera intentona de ejecutar la orden de arresto contra Yoon fracasó el 3 de enero después de que el equipo de seguridad del cesado presidente impidiera que los agentes entraran en la vivienda. Fuentes citadas por Yonhap afirman que la segunda operación podría tener lugar el miércoles e implicar a mil agentes.