BRASILIA, 20 May. (Reuters/EP) -
Los Juegos Olímpicos de Ríos de Janeiro se celebrarán este verano en medio de la crisis política que sufre Brasil por el 'impeachment' contra Dilma Rousseff, según han indicado fuentes gubernamentales, a pesar de los esfuerzos del Gabinete de Michel Temer por resolverlo antes.
Los jefes de Estado y de Gobierno que asistirán, por invitación de Rousseff, a la ceremonia inaugural del 5 de agosto se encontrarán en su lugar a Temer, que ha asumido la Presidencia de forma interina hasta conocer el resultado del juicio político.
Un asesor presidencial ha aclarado que, aunque el nuevo Ejecutivo confiaba en zanjar este tema antes de que el foco internacional estuviera puesto en Brasil con motivo de este evento deportivo, finalmente parece que no será posible.
El presidente del Senado, Renan Calheiros, ha suspendido el habitual receso parlamentario de julio, precisamente, para acelerar el proceso de 'impeachment' lo máximo posible, pero trabajadores de la cámara alta apuntan que se prolongará al menos hasta septiembre.
"Lo ideal sería un proceso de cuatro meses que concluyera en septiembre, porque seis meses (el máximo legalmente estipulado) es demasiado", ha considerado Rose de Freitas, senadora del Movimiento Democrático Brasileño (PMDB), el partido de Temer.
El pasado 12 de mayo el Senado confirmó la votación en la Cámara de Diputados y se posicionó a favor del 'impeachment' --con 51 votos frente a 22--, con lo que Rousseff quedó suspendida temporalmente y Temer asumió el cargo de forma interina.
Con ello se abrió también un periodo de investigación que podrá durar un máximo de 180 días --hasta el 8 de noviembre-- que concluirá con un juicio político en el Senado dirigido por el presidente del Tribunal Supremo.
Si dos tercios de los senadores (54), habiendo un quórum de 42, respaldan la destitución de Rousseff, ésta será definitiva y Temer gobernará hasta las próximas elecciones presidenciales, previstas para 2018.