MADRID, 7 Oct. (EUROPA PRESS) -
La presidenta liberiana, Ellen Johnson-Sirleaf, una de las tres galardonadas este viernes con el Nobel de la Paz 2011, ha defendido que el "mérito" del galardón es de todos los liberianos, pero en especial de las mujeres, por el papel que éstas desempeñaron en la consecución de la paz y el fin de la guerra civil en el país africano.
"Lo acepto en nombre del pueblo liberiano, así que el mérito es de ellos", ha declarado la presidenta, que la semana que viene se juega su reelección, en declaraciones a la CNN. "En los últimos ocho años, hemos tenido paz y todos y cada uno de ellos han contribuido a esta paz", ha destacado.
Para Johnson-Sirleaf, la paz que acabó con 14 años de guerra civil debería atribuirse sobre todo a las mujeres liberianas, "mujeres de todos los estratos, que retaron a la dictadura del ex presidente Charles Taylor y que permanecieron bajo el sol y la lluvia trabajando por la paz en el país".
El Comité Nobel del Parlamento noruego ha destacado que "Ellen Johnson-Sirleaf es la primera mujer elegida democráticamente para la Presidencia en la historia de África". "Desde su investidura en 2006, ha contribuido a garantizar la paz en Liberia, a promover el desarrollo económico y social y a reforzar la posición de las mujeres", ha agregado.
El premio también ha recaído en la activista liberiana Leymah Gbowee y la activista yemení Tawakkul Karman. De Gbowwe, ha resaltado que "movilizó y organizó a las mujeres de todas los grupos étnicos y religiosos a fin de garantizar la participación de la mujer en las elecciones". "Desde entonces ha trabajado por mejorar la influencia de las mujeres en África Occidental y en las situaciones de posguerra", ha afirmado.
En cuanto a la tercera galardonada, el Comité ha declarado que, "en las circunstancias más difíciles, tanto antes como durante la 'Primavera Árabe', Tawakkul Karman jugó un papel destacado en la lucha por los derechos de las mujeres y por la democracia y la paz en Yemen".
"El Comité Nobel noruego espera que el premio a Ellen Johnson-Sirleaf, Leymah Gbowee y Tawakkul Karman ayude a poner fin a la represión de las mujeres, que todavía persiste en muchos países, y a hacer realidad el gran potencial que las mujeres representan para la democracia y la paz", ha concluido.