El ministro de Exteriores de Jordania, Ayman Safadi - Europa Press/Contacto/Angelika Warmuth/Munich Secu
MADRID, 11 Mar. (EUROPA PRESS) -
El ministro de Exteriores de Jordania, Ayman Safadi, ha exigido este lunes a Israel que levante las restricciones impuestas en la mezquita de Al Aqsa, situada en la Explanada de las Mezquitas, durante el mes de Ramadán para evitar una nueva escalada de la violencia en la región.
"Israel debe levantar tales restricciones, respetar la libertad de culto y permitir que los fieles realicen sus deberes religiosos durante el mes de Ramadán", ha señalado durante una rueda de prensa conjunta con el secretario del Vaticano encargado de las Relaciones con los Estados, el arzobispo Paul Richard Gallagher.
Asimismo, ha indicado que "profanar la santidad de la mezquita de Al Aqsa es jugar con fuego", mientras que ha recordado que las "medidas ilegales" tomadas por Israel, incluyendo la construcción de nuevos asentamientos, "no contribuirán a establecer la paz".
Por todo ello, ha instado al Vaticano, así como a todos los países del mundo, a "hacer todo lo posible" para garantizar que Israel respete el estatus legal e histórico de todos los lugares sagrados, según ha recogido la agencia de noticias Petra.
"El mes de Ramadán es el mes de la misericordia, la seguridad y la tranquilidad, pero lamentablemente esta no es la realidad que viven 2,3 millones de personas en Gaza, que siguen sufriendo la brutalidad de la agresión israelí", ha recordado.
Las fuerzas de seguridad israelíes impidieron en la noche del domingo a cientos de fieles musulmanes entrar a la mezquita de Al Aqsa para unos primeros rezos tras el inicio del Ramadán. Israel ha instalado además alambre de espino en la valla adyacente al complejo, cerca de la Puerta de los Leones, según ha denunciado la administración palestina de Jerusalén.
Tanto el Gobierno palestino como el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) han advertido a Israel de que no establezca restricciones al acceso y que permita la libertad de culto en la Explanada de las Mezquitas --conocida por los judíos como Monte del Templo-- para evitar un mayor aumento de las tensiones.
Israel lanzó su cruenta ofensiva contra Hamás en la Franja de Gaza tras los ataques del 7 de octubre, que dejaron alrededor de 1.200 muertos y unos 240 secuestrados. Las autoridades gazatíes han cifrado en más de 31.100 los muertos en el enclave palestino.