BRUSELAS 17 Oct. (EUROPA PRESS) -
El presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, ha defendido este lunes la mejora "real y tangible" en la vida de los miles de refugiados sirios instalados en Turquía, gracias a la ayuda de al menos 3.000 millones de euros prometida por la Unión Europea a Ankara a cambio de frenar el paso de demandantes de asilo.
En una carta remitida a los líderes europeos y al presidente del Consejo europeo, Donald Tusk, días antes de la cumbre europea que dedicará buena parte de su agenda a la política migratoria, Juncker ha repasado los beneficios de la ayuda entregada a Turquía.
El fondo para la ayuda de los refugiados en Turquía --que el Ejecutivo comunitario ha insistido en remarcar que no es para el Gobierno turco, sino para la población que huye de Siria-- cuenta con el compromiso del bloque de asignar al menos 3.000 millones de euros, con un posible aumento hasta los 6.000 si se demuestran necesarios.
Para llegar a esa cifra, las arcas comunitarias aportaron 2.000 millones de euros, mientras que los Estados miembros se han comprometido a aportar el millón restante.
Hasta la fecha, apenas 467 millones de euros del total se han desembolsado en proyectos concretos y cerrados, aunque hay ya asignados unos 1.200 millones de euros, incluidos una partida de 600 millones de euros para escolarizar a medio millón de niños sirios y para asegurar servicios sanitarios básicos a cerca de dos millones de refugiados.
"La financiación desde el fondo está marcando la diferencia real y tangible en las vidas de los cerca de 3 millones de refugiados albergados en Turquía", ha destacado Juncker en su carta.
Entre los proyectos más innovadores puestos en marcha gracias a este instrumento figura el de repartir tarjetas de débito entre una población de un millón de refugiados, que se cargarán con una asignación concreta mensualmente para que las familias cubran sus necesidades básicas. El programa cuenta con un presupuesto de 348 millones de euros.
Los jefes de Estado y de Gobierno de la Unión Europea se reunirán el próximo jueves y viernes en Bruselas con la política migratoria entre los asuntos clave de su agenda, aunque, según ha admitido una portavoz comunitaria este lunes, "no habrá propuestas nuevas", porque ya hay muchas iniciativas "sobre la mesa".