BRUSELAS 18 Nov. (EUROPA PRESS) -
El presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, no ha tratado de mantener ningún contacto con el presidente electo estadounidense, Donald Trump, todavía, ni nadie de su equipo de transición a pesar de que ha pasado más de una semana desde su elección.
"No estoy al tanto de ningún contacto que haya tenido lugar, pero como saben el presidente Obama todavía es el presidente de Estados Unidos", ha zanjado en rueda de prensa el portavoz adjunto de Juncker, Alexander Winterstein.
Juncker tampoco ha hecho ningún intento de contacto con la nueva Administración de Trump, ha precisado, insistiendo en que queda "mucho tiempo" todavía hasta que la nueva Administración asuma el 20 de enero sus funciones.
"La toma de posesión será en enero. Hay mucho tiempo para establecer contactos y discutir los desafíos comunes que sólo juntos podrán atajar Estados Unidos y la UE", ha asegurado el portavoz comunitario.
Juncker, quien no ocultó su preferencia por Hillary Clinton, durante la campaña electoral, ha admitido que le preocupa que Trump lleve a cabo algunas de sus promesas que hizo en su "repugnante" campaña.
El presidente de la Comisión Europea y el presidente el Consejo Europeo, Donad Tusk, defendieron en su carta de felicitación al presidente electo estadounidense la necesidad de "reforzar" las relaciones trasatlánticas y le invitaron a visitar Europa "tan pronto como le conveniera" para definir "el rumbo" de las relaciones bilaterales.
Los Veintiocho confían en mantener "una relación fuerte" con la nueva Administración de Trump y acordaron implicarse "con la Administración entrante desde las primeras semanas de la transición", explicó sin embargo la Alta Representante de Política Exterior y de Seguridad Común de la UE, Federica Mogherini, al término de la cena informal de los jefes de la diplomacia europea el pasado domingo para abordar el posible impacto de la victoria de Trump para las relaciones.
Mogherini, que confía en visitar "pronto" Washington y avanzó que invitará "al futuro secretario de Estado" estadounidense a una de las próximas reuniones de los ministros de Exteriores de la UE, incidió en la necesidad de "preparar el terreno para el cambio" aunque seguirían trabajando "día y noche con la actual Administración" Obama.