La junta golpista de Burkina Faso encarga a una comisión la creación de un "calendario de transición" en dos semanas

MADRID, 6 Feb. (EUROPA PRESS) -

La junta militar golpista que ostenta el poder Burkina Faso ha anunciado a última hora de este sábado la creación de una comisión para que elabore, en un plazo de dos semanas, un "calendario de transición" que marque el derrotero del país hacia unas elecciones democráticas.

"Se ha creado una comisión técnica para redactar los textos y el calendario de transición", de acuerdo con el decreto firmado por el actual líder burkinés, el teniente coronel Paul-Henri Sandaogo Damiba, y recogido por el portal de noticias Infowakat.

La junta responde así a la petición de la Comunidad Económica de los Estados de África Occidental (CEDEAO), que ha decidido no imponer nuevas sanciones contra Burkina Faso --suspendida de la organización el 28 de enero a causa del golpe-- a cambio de un "calendario razonable para el retorno al orden constitucional".

La comisión está formada por 15 miembros, entre ellos abogados, sociólogos y economistas, y su informe final incluirá una "propuesta sobre la duración de la transición y los métodos de implementación".

No obstante, la junta militar ha subrayado que, sea cual sea el resultado del informe, quedará a evaluación de las "fuerzas vivas" del país, es decir, de la opinión popular.

El golpe de Estado liderado por Damiba ocurrió a finales del mes pasado tras un amotinamiento de militares en protesta por la inseguridad y la falta de medios para hacer frente al yihadismo, motivo por el que los soldados exigieron la dimisión del presidente, Roch Marc Christian Kaboré, ahora mismo bajo detención, y otros altos cargos de las fuerzas de seguridad.

La asonada tuvo lugar casi dos semanas después de que las autoridades anunciaran el arresto de ocho militares, incluido un comandante, en relación con un presunto complot para "desestabilizar" las instituciones del país.

El país africano ha experimentado en términos generales un aumento significativo de los ataques desde el año 2015. Estos, obra tanto de la filial de Al Qaeda como de la de Estado Islámico en la región, han contribuido también a incrementar la violencia intercomunitaria y han hecho que florezcan los grupos de autodefensa.