MADRID, 25 May. (EUROPA PRESS) -
La junta militar de Guinea ha reclamado este miércoles a la Unión Africana (UA) que "acompañe" el proceso de transición puesto en marcha tras el golpe de Estado de septiembre de 2021, que derrocó al entonces presidente del país, Alpha Condé, ante las críticas internacionales por lo prolongado de este periodo.
El Parlamento de Guinea aprobó el 11 de mayo un calendario de transición de 36 meses, tres menos que los propuestos en abril por el líder de la junta, Mamady Doumboya, si bien numerosos partidos opositores acusaron al organismo de no tener autoridad para adoptar esta decisión.
El ministro de Exteriores guineano, Morissanda Kouyaté, ha indicado que "es legítimo que Guinea espere que la UA y las organizaciones subregionales apoyen, acompañen y comprendan la necesidad de una transición tranquila, responsable e inclusiva".
Kouyaté ha ensalzado a los "valientes soldados" que estuvieron detrás del golpe de Estado y ha destacado "la clarividencia" de Doumbouya, antes de defender que la asonada "ha salvado al país del saqueo de recursos, la visión entre sus hijos, la impunidad y el estancaiento político, social y económico".
Así, ha hecho hincapié en que "se ha abierto una transición fundamentada en un diálogo inclusivo, la concertación, el acto de escuchar, la tolerancia y el perdón", tal y como ha recogido el portal guineano de noticias Vision Guinée.
"Esta transición tendrá lugar durante un periodo de 36 meses durante los cuales habrá un cambio profundo, positivo, estable, duradero y altamente beneficioso para la población guineana", ha dicho, antes de recalcar que estos cambios tendrán lugar "a todos los niveles".
Doumbouya defendió en enero que el golpe de Estado contra Condé, fue "impuesto" y "una expresión de la voluntad del pueblo guineano", tras las críticas de la Comunidad Económica de Estados de África Occidental (CEDEAO) ante los aplazamientos en la puesta en marcha del calendario de transición.
La asonada fue dada tras meses de crisis política en el país por la decisión de Condé de modificar la Constitución para presentarse a un tercer mandato y su victoria en las presidenciales de 2020, en las que el resto de candidatos, entre ellos el líder opositor, Cellou Dalein Diallo, denunciaron fraude.