Actualizado: lunes, 30 octubre 2017 16:32

ÁMSTERDAM 30 Oct. (Reuters/EP) -

Eshetu Alemu, de 63 años, se ha declarado inocente este lunes ante los tribunales de Países Bajos por los cargos por crímenes de guerra de los que se le acusa, entre ellos encarcelar, torturar y asesinar a varios opositores del ex presidente de Etiopía Mengistu Haile Mariam durante los años 70.

Alemu está acusado de haber ordenado la muerte de unos 75 prisioneros en 1978 y de ser el responsable de la encarcelación y el trato inhumano que recibieron al menos 200 personas durante la época en la que Mengistu representaba a la provincia etiope de Gojjam. Alemu, que llegó a Países Bajos procedente de Etiopía en 1990 en busca de asilo político, ha asegurado que los jueces se equivocan de hombre.

La oficina del tribunal nacional de Etiopía ha contado que, a pesar de su ausencia, Alemu había sido condenado a muerte en 2007 por su implicación en la campaña de represión conocida como "terror rojo", puesta en marcha por la junta militar comunista que encabezaba Mengistu y que supuso la marcha del emperador Haile Selassie en 1974.

Sin embargo, esta sentencia de la Justicia etíope no puede ejecutarse en Países Bajos ya que la legislación del Estado europeo no contempla la pena de muerte. Por eso, los tribunales han considerado la celebración de un nuevo juicio como la mejor opción para que Alemu rinda cuentas.

El juicio, que se ha basado en una investigación realizada por un cuerpo de la Policía Nacional de Países Bajos que estudia crímenes internacionales, se ha celebrado en un tribunal neerlandés, en La Haya.

A lo largo de esta semana, el juez escuchará tanto las alegaciones del acusado --que ha estado bajo custodia desde 2015-- como los testimonios de las víctimas, en su mayoría personas etíopes que viven en el extranjero. Aún no hay fecha para que el tribunal comunique su veredicto.

Mengistu fue declarado culpable por genocidio en 2007, en un juicio celebrado en Etiopía, después de que él y otros líderes militares fuesen acusados de haber matado a miles de personas durante los 17 años que estuvo en la Presidencia. Mengistu dejó el poder en 1991 y huyó a Zimbabue, donde reside actualmente.

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