El exmandatario había apelado la decisión del Tribunal Supremo peruano asegurando que no había cometido un delito de rebelión
MADRID, 30 Dic. (EUROPA PRESS) -
El Poder Judicial de Perú ha ratificado este jueves la prisión preventiva de 18 meses dispuesta contra el expresidente Pedro Castillo mientras es investigado por la comisión de delitos de rebelión, conspiración, abuso de autoridad y perturbación de la tranquilidad pública.
La Sala Penal Permanente del Tribunal Supremo peruano mantendrá al exmandatario en la Cárcel de Barbadillo, en Ate, a las afueras de Lima --donde también permanece el expresidente Alberto Fujimori-- dando la razón a la Fiscalía General de Perú, según ha informado 'La República'.
"Se declara infundado el recurso de apelación interpuesto por el investigado José Pedro Castillo Terrones y fundado, en parte, el recurso de apelación interpuesto por el señor fiscal supremo de la Fiscalía", se lee en la resolución.
En este sentido, el Poder Judicial ratifica su decisión de imponer una medida de 18 meses de prisión preventiva contra el expresidente, mientras es investigado por los presuntos delitos de rebelión y conspiración.
Así, Castillo cumplirá 18 meses de prisión preventiva a pesar del intento de su equipo de legal de dejarlo en libertad condicional.
La decisión del Poder Judicial peruano se da un día después de la celebración de la audiencia en la que se valoró el recurso presentado por el expresidente solicitando su liberación.
"Jamás he cometido delito de rebelión pues nunca me levanté en armas, ni he dicho a otros que lo hagan. Debo decir que quien sí se levantó en armas es este Gobierno tiránico que ha acabado con la vida mis 28 hermanos peruanos en Andahuaylas, Ayacucho y otros lugares", relató el expresidente en la audiencia, defendiendo su inocencia.
Castillo afirmó que no había cometido delito de conspiración, acusando a "aquellos que, desde el Congreso y otras instituciones", habrían maquinado la caída de su Gobierno a través de "sucesivos pedidos de vacancia presidencial y otras artimañas".
"Si mi familia ha tenido que salir del país y refugiarse es porque en Perú corría peligro, no solo su libertad, sino también su integridad y sus propias vidas. Sin embargo, yo me quedaré aquí para afrontar cualquier proceso porque tengo la verdad de mi lado", remachó Castillo durante su intervención.
La prisión preventiva decretada por el Poder Judicial peruano --y propuesta por la Fiscalía General-- tiene lugar después de que Castillo anunciase la disolución del Congreso y la instauración de un Gobierno de excepción el pasado 7 de diciembre, hechos tras los cuales fue destituido por el Congreso y posteriormente detenido por las fuerzas de seguridad peruanas.