UAGADUGÚ, 1 Dic. (Reuters/EP) -
El presidente electo de Burkina Faso, Roch Marc Kaboré, ha prometido este martes ocuparse de las "necesidades fundamentales" de la población, que han quedado relegadas a un segundo plano en los últimos tiempos debido a la crisis política desatada con el golpe de Estado.
"Necesitamos organizarnos para ocuparnos de las preocupaciones de todo el país porque nuestro primer objetivo no es solamente reavivar la economía, sino al mismo tiempo satisfacer las necesidades fundamentales de la población burkinesa", ha dicho a Reuters.
El próximo jefe de Estado se ha mostrado consciente de que "los desafíos son numerosos y múltiples" y ha mencionado, además de las dificultades económicas, "la educación, la sanidad y el acceso a agua potable", entre otros.
Kaboré ha obtenido la victoria en la primera vuelta con el 53,5 por ciento de los votos, según la Comisión Electoral. Por detrás han quedado el ex ministro de Finanzas Zephirin Diabre, con el 29,65 por ciento de las papeletas.
Kaboré fue primer ministro y presidente de la Asamblea Nacional durante varios años bajo el mandato de Blaise Compaoré, quien fue derrocado por un levantamiento en octubre de 2014, después de 27 años en el poder.
Así, estas elecciones presidenciales representaban un momento clave para una nación gobernada por líderes que mayoritariamente han llegado al poder a través de golpes de Estado desde que se declaró la independencia de Francia en 1960.
Los comicios del domingo, que se produjeron sin ningún altercado, podrían servir como ejemplo de transición democrática en África, donde los veteranos gobernantes de Burundi y República del Congo tendrían que cambiar este año la Carta Magna para poder continuar en el cargo.