MADRID 20 Ago. (EUROPA PRESS) -
Un presunto asesino en serie acusado de matar a 42 mujeres se ha fugado junto a otros 12 presos de una comisaría de la capital de Kenia, Nairobi, gracias aparentemente a la connivencia de varios agentes, como han reconocido este martes las autoridades del país africano.
Los prófugos, en su mayoría inmigrantes eritreos que entraron en Kenia de forma irregular, se fugaron de la comisaría tras cortar un techo de alambre, algo que la propia Policía ha asumido que habría sido imposible sin algún tipo de ayuda desde dentro.
Entre quienes ahora están en paradero desconocido destaca Collins Jumaisi Khalusha, detenido en julio tras el hallazgo de varios cadáveres en un vertedero. La Policía ha pedido la colaboración ciudadana para tratar de volver a detenerlo, habida cuenta de su peligrosidad.
Las autoridades localizaron en su vivienda el material con el que supuestamente desmembraba los cuerpos y el sospechoso terminó confesando en los primeros interrogatorios que había asesinado a 42 mujeres desde el año 2022, entre ellas su mujer. Ante el juez, negó esta confesión, que atribuyó a supuestas coacciones.
A la espera de que pueda ser arrestado de nuevo, un responsable de la Policía, Gilbert Masengeli, ha puesto el foco en cómo pudo escapar de unas instalaciones teóricamente protegidas. En rueda de prensa, ha dado por hecho que los 13 prófugos "recibieron ayuda desde dentro", por lo que ha ordenado suspender a los ocho agentes de guardia, según el diario 'The Standard'.
"La unidad de asuntos internos investiga el suceso y quien sea hallado culpable se enfrentará a todo el peso de la ley", ha advertido.